EL SENTIMIENTO DE DOLOR: LA INTERPRETACIÓN METAFÍSICA DE TOMÁS DE AQUINO

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Claudia Márquez Pemartín
Universidad Panamericana (MÉXICO)

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The Feeling of Pain: A Metaphysical Interpretation from Thomas Aquinas

ABSTRACT: The metaphysical concepts of act and potency that are central to the Thomistic tradition can help us solve the problem of understanding pain, sorrow and grief. Human beings, as natural creatures, are composed of act and potency. If rightly understood, these concepts can give a rational explanation to the reality of pain-without having recourse to religious beliefs-by accepting it as a natural derivation of our natural limits.

 

Introducción

Una metafísica que no dé razón de los fenómenos ordinarios en la vida del hombre bien podría desaparecer pues aunque "Todos los hombres desean por naturaleza saber", no es menos cierto que también todos los hombres desean ser felices (1) y se considera la felicidad el máximo bien y el fin de todo nuestro obrar. El tema del dolor, que tiene mucho que ver con la felicidad, si no pudiese ser abordado desde una perspectiva metafísica, mostraría que realmente esta ciencia es elucubración vana. (2)

Siendo lo más propio y distintivo del hombre el conocimiento racional, aunque pueda dar explicación de los fenómenos humanos por la fe (3) u opinión, es más digno y adecuado a la naturaleza humana el procurar explicaciones racionales. Si la ciencia deduce "...sus conclusiones a partir de principios evidentes por la luz de una ciencia superior", (4) y la Metafísica pretende ser la primera y superior de todas las ciencias, (5) entonces ha de dar respuesta a los grandes interrogantes humanos. Uno de estos interrogantes, que cobra especial relevancia biográfica, es el tema del dolor.

 

Significado del Dolor

El término "dolor" -"sensación molesta y aflictiva de una parte del cuerpo por causa interior o exterior. 2. Sentimiento de pena o congoja" (6) - en castellano, correspondiente quizá al de "pain" o "ache" e incluso el de "grief" del inglés corresponde al latino doleo, y en la terminología tomista puede matizarse y distinguirse de sufrimiento, padecimiento, tristeza, etc., los cuales cuentan con los correspondientes términos latinos; sin embargo, para los efectos de este trabajo no es relevante el término utilizado ya que la raíz metafísica de todo tipo de padecimientos "negativos" -y entrecomillamos negativos porque si, como pretendemos, logramos mostrar la raíz metafísica del dolor y el sufrimiento, dejaremos de considerar esos padecimientos como negativos (7) -. La raíz, decíamos, es la misma.

La tesis que sostenemos es que siendo las nociones metafísicas de acto y potencia explicativas de la realidad en su totalidad, estas nociones pueden dar cabal respuesta a la pregunta sobre el sufrimiento; y una vez teniendo una respuesta sobre el porqué del sufrimiento, este dejará de ser tal para quedar inscrito en un ámbito de racionalidad que permite al hombre aceptarlo como algo no fruto de la fatalidad sino de la naturaleza misma. (8)

Esta tesis se aleja tanto de las malentendidas posturas estoicas que proponen la serenidad de ánimo como la meta de la vida humana, como de posturas pretendidamente hedonistas que busquen el placer por el placer mismo:

"Así la definición del sumo bien puede unas veces extenderse, y estrecharse otras; con lo cual vendrá a ser lo mismo decir que el sumo bien es un ánimo que estando contento con la virtud, desprecia las cosas que penden de la fortuna, o que es una invencible fortaleza de ánimo, sabedora de todas las cosas, agradable en las acciones, con humanidad y estimación de los que le tratan.

»Quiero pues que llamemos bienaventurado al hombre que no tiene por mal o por bien sino el tener bueno o malo el ánimo...". (9) o bien "Todo placer es un bien por naturaleza pero no todo placer es querido por la voluntad; análogamente todo sufrimiento es un mal, pero no todo sufrimiento es evitado voluntariamente" (10) o bien, la postura más moderna del padre del existencialismo: "Not until a man has become so utterly unhappy, or has grasped the woefulness of life so deeply that he is moved to say, and mean it: life for me has no value -not till then is he able to make a bid for Christianity.

"And then his life may acquire the very highest value" (11)

El dolor, el sufrimiento en la vida humana -dejamos ahora de lado la cuestión de si cabe realmente sufrimiento o dolor en el resto de los seres naturales (12) - es una constante de tal evidencia que no cabe cuestionarnos su existencia inexorable. Es más, podemos decir, con Aurelio Fernández que el dolor es una de las experiencias más universales de la humanidad, superada tan solo por la experiencia del amor. "Sólo la vivencia del amor puede superarla por su riqueza significativa. Pero el hecho del dolor es más radical, porque mientras que el amor se busca y asume todas las demás realidades que le ayudan a ser más gratificante, el dolor se rehuye porque es aflictivo y prescinde de todo lo demás para quedarse solo ante el sufrimiento". (13) Más aun, no sólo lo rechazamos de manera instintiva casi todos los hombres sino que orientamos gran parte de nuestros esfuerzos técnicos a eliminarlo -hasta donde nos es posible- de la vida cotidiana. Y esto es lógico pues el dolor se conecta con el mal que es una negación metafísica.

 

Nociones Metafísicas de "Acto" y "Potencia"

Como bien sabemos, estas nociones ocupan un lugar privilegiado en la metafísica de Tomás de Aquino. Siendo nociones heredadas de la metafísica aristotélica, Aquino las lleva a sus últimas consecuencias y las aplica a todo el orden de la realidad. Así, en las Veinticuatro tesis tomistas (14) leemos: "La potencia y el acto dividen el ser de tal suerte que todo cuanto es, o bien es acto puro, o bien es acto compuesto de potencia y acto como principios primeros e intrínsecos".

A) Acto y Potencia en Cuanto Opuestos

Estas nociones aunque pueden aplicarse a los distintos tipos de oposición de los que hablan Aristóteles en Analíticos Posteriores y Tomás de Aquino en el opúsculo de Los cuatro opuestos, (15) con relación al tema del dolor se concreta al segundo tipo de oposición que es la oposición privativa, la cual es la más cercana al analogado principal que es la oposición contradictoria pero es menos radical porque admite un sujeto. esta es la oposición entre el tener y el no tener, entre el ser y el no ser. En esta oposición uno de los miembros excluye realmente al otro, pero la exclusión no es completa pues persiste el sujeto de ese tener o no tener. Este sujeto, en esta relación, puede considerarse como un término medio.

B) Noción de Acto

Como sabemos, acto dice perfección y, hasta cierto punto, plenitud y finalidad, sin embargo, la noción de acto es una noción análoga. Es decir, acto se puede decir de distintas realidades pues por un lado acto designa al movimiento (acto del ente en potencia en cuanto está en potencia), sea local, cualitativo o sustancial. Pero también acto designa a la actividad, sea práxica o poiética. Una tercera acepción de acto es la de determinación o forma, tanto en sentido real como en sentido lógico y finalmente acto designa -y este es el sentido principal aunque temporalmente no sea el primero- ser o existir, esse o (((((, es decir, la actualidad de cualquier cosa, el estar fuera de la nada y fuera también del conocimiento.

El dolor o el sufrimiento humano, en cuanto que realidades, participan por supuesto de la noción de acto. Tiene una cierta entidad y en esa medida es acto como forma. Nunca el dolor o el mal puede ser acto como esse pues eso sería el mal o el dolor subsistentes pero en todos los demás ordenes de la actualidad el dolor es acto: puede ser pasión, acción, cualidad o privación. En cuanto privación, el dolor es también una especie de potencia pues es una especie de no ser. (16)

C) Noción de Potencia

Potencia, al igual que acto, es una noción análoga, pero mientras que la noción de acto no hace necesariamente referencia a la de potencia, la potencia indefectiblemente hace referencia al acto. Es decir potencia es siempre correlativa al acto.

Potencia se entiende principalmente de dos maneras (17) : como potencia activa (correspondiente a las ideas de movimiento y acción práxica o poiética) y como potencia pasiva (que remite al acto "estático" que designa la forma o esencia y al esse aunque no olvidemos que esse y forma son principio y fin del movimiento). Sin embargo Tomás de Aquino incluye dentro de los principios de las cosas de la naturaleza la privación -si bien afirma que es principio no por si sino por accidente (18) : "Tres cosas se requieren para que haya producción: el ser en potencia, o sea la materia; que no esté en acto, o sea, la privación; y aquello por lo que se es en acto, lo cual es la forma". (19)

Pues bien, el sufrimiento humano no es potencia, puesto que para desgracia nuestra es tremendamente real. (20) Es acto o privación de acto.

 

Conexión de las Nociones de "Acto" y de "Potencia" con la Realidad del Dolor Humano

Quédanos pues, ahora, hacer explícito lo que parece que está implícito. Los seres humanos somos compuestos, como toda la realidad natural, de acto y de potencia. Sin embargo esta composición nuestra es peculiar pues por el carácter de espiritual del alma humana, por el cual tiende a lo infinito tenemos aspiraciones a lo que no incluye potencia y esas aspiraciones a las cuales es común denominar apetito intelectual o voluntad, evidentemente proceden de un cierto conocimiento. Sin embargo también nuestra voluntad y nuestra inteligencia son limitadas y mezcladas de potencia (realidad que también nos supone dolor, sufrimiento) con lo cual aspiramos a lo total, a lo absoluto, pero sin poder -en razón de nuestra limitación natural- abarcar lo infinito, lo absoluto. Y lo análogo ocurre en el orden corporal -no en vano constituyen cuerpo y forma una unidad substancial-. Porque tenemos un cuerpo con múltiples operaciones pero todas ellas marcadas por la potencialidad no podemos menos que sufrir pues no pueden coexistir en esa realidad tan limitada dos actos distintos y opuestos: la presencia del virus de la gripa y la presencia de la salud perfecta. (21)

 

En síntesis, pienso que, acudiendo a las nociones de acto y de potencia podemos hacer una cierta apología del dolor, no sólo encontrándole un sentido trascendente o psicológico (indudablemente el dolor hace madurar: como afirma un contemporáneo nuestro..."las almas, como los higos, maduran pinchándolas") sino descubriendo que es una necesidad absoluta porque queremos todo y no podemos abarcarlo. Y esto recuerda, sin querer parecer moraleja, que también en el pensamiento de Tomás de Aquino, es más perfecto el acto de la virtud de la fortaleza orientado a soportar y aguantar las dificultades, que el propio acto de acometer.

 

Bibliografía

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——De Ente et Essentia, Editorial Tradición, México 1979.

——Los principios de la realidad natural, Editorial Tradición, México 1975.

——Quaestiones Disputatae, II De potentiae, Marietti Editori, Editio X, Turín 1965.

——Suma contra los Gentiles, Eds. Porrúa, S.A., 2a. Edición, México 1985.

——Los cuatro opuestos, en "Anuario Filosófico" Universidad deNavarra, VIII (1974) Pamplona, España.

ARISTÓTELES: Ética a Nicómaco, Edición bilingüe y traducción de María de Araujo y Julián Marías, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid 1989.

——Metafísica, Edición trilingüe de Valentín García Yebra, Ed. Gredos, 1a. Reimpresión de la 2a. edición, Madrid 1987.

DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA, Real Academia Española, 21 Ed. Espasa-Calpe, 21a. edición, Madrid 1989.

DIÓGENES LAERCIO: Vidas de los filósofos más ilustres, Editorial Porrúa, S.A., 2a. Edición, México 1991.

FERNÁNDEZ, Aurelio: Teología Moral II: moral de la persona y de la familia, Ediciones Aldecoa, Burgos España 1993.

GARCÍA LÓPEZ, Jesús: Lecciones de Metafísica Tomista, Ediciones de la Universidad de Navarra, S.A., Pamplona España 1995.

HUGON, Eduardo, O.P: Las veinticuatro tesis tomistas, versión castellana de Adriano Suárez, O.P., Editorial Porrúa, S.A., Col. "Sepan cuantos...", México 1974.

KIERKEGAARD, SØren: The Diary of Søren Kierkegaard, Edited by Peter Rhode, Citadel Press, Carol Publishing Group Edition, New York 1990.

LEWIS, C.S.: Una pena observada, versión castellana de Oscar Luis Molina S. Ed. Andres Bello, 3a. edición, Chile 1995.

MAHILLO MONTE, Javier: El sufrimiento humano según Santo Tomás, edición del autor. Tesis doctoral presentada en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Navarra, Pamplona España 1989

SÉNECA: De la vida bienaventurada, IV en Tratados Filosóficos, Editorial Porrúa, S.A. Col. "Sepan cuantos...", 5a. edición, México 1992.

 

Notas

(1) Cfr. ARISTÓTELES: Ética a Nicómaco, I, 4. 1095a.

(2) AQUINO, Tomás de: In Sent. 3 d. 35, q. 1, a. 3, sol. 2. Finis non est cognitio sed opus

(3) Tanto en el Cristianismo como en el Budismo, el sufrimiento, el dolor, tienen un sentido purificador de las culpas y limitaciones humanas. Inclusive se puede considerar el dolor como signo de predilección divina pues Dios nos identifica con su hijo Jesucristo.

(4) AQUINO, Tomás de: Suma Teológica, I, c., a. 2, corpus.

(5) ARISTÓTELES: Metafísica 982b4-7: "Y es la más digna de mandar entre las ciencias y superior a la subordinada, la que conoce el fin por el que debe hacerse cada cosa. Y este fin es el bien de cada una, y, en definitiva, el bien supremo en la naturaleza toda".

(6) DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA, Real Academia Española, 21 De. Espasa-Calpe, Madrid 1992, ad vocem.

(7) No deja de recordar esta afirmación Isak Dinnesen en su obra Out of Africa cuando dice que toda pena que puede convertirse en una narración, en una historia, se convierte en tolerable. La explicación de esto pienso que es la misma que la de mi propia afirmación. Cuando convertimos un dolor objetivo sea físico o espiritual en objeto de nuestra consciencia deja de ser dolor para ser un objeto de conocimiento. Y el conocimiento intelectual es una de las realidades más satisfactorias para el hombre, aun cuando aquello que se conozca pueda considerarse como negativo. "La contemplación puede ser deleitable en un doble aspecto: en primer lugar, por razón de la operación misma, porque a cada uno le resulta agradable la operación que le es conveniente por su propia naturaleza o por costumbre. Ahora bien, la contemplación de la verdad es propia del hombre según su naturaleza, por ser animal racional. Por eso todos los hombres desean naturalmente saber y, por consiguiente, encuentran deleite en el conocimiento de la verdad, sobre todo aquellos que poseen el hábito de sabiduría y de ciencia, que trae como consecuencia el poder contemplar sin dificultad. (...) En ambos casos el deleite supera a todo deleite humano, ya que el deleite espiritual es superior al carnal" (AQUINO, Tomás de: Suma Teológica, I-IIae, q. 180, a. 7, c.).

(8) Una postura radicalmente opuesta a la que mantenemos es la de Kierkegaard cuando afirma: "We constantly hear now: to say that one cannot understand this or that is not enough for science, for science desires to understand. Here lies the fault, just the contrary should be said, viz. : when «human» science refuses to acknowledge that there is something it cannot understand or, still more precisly: something it clearly undestands that it cannot understand, then all is confusion. It is precisely the task of human apprehension to understand that there is something it cannot understand, and also what that something is" The Diary of SØrenKierkegaard, Edited by Peter Rhode, Citadel Press, Carol Publishing Group Edition, New York 1990, p. 158. Kierkegaard's Papers, VIII1 A 11.

(9) SÉNECA: De la vida bienaventurada, IV en Tratados Filosóficos, Editorial Porrúa, S.A., Colección "Sepan cuantos", 5a. edición, México 1992. p. 111.

(10) DIÓGENES LAERCIO: Vidas de los filósofos más ilustres, X, 96, citando a Epicuro. Editorial Porrúa, S.A., Colección "Sepan cuantos...", 2a. edición, México 1991. p- 277.

(11) KIERKEGAARD, SØren, The Diary of SØrenKierkegaard, Edited by Peter Rhode, Citadel Press, Carol Publishing Group Edition, New York 1990, p. 150. Kierkegaard's Papers, XI2 A 115.

(12) Para este interesante tema, que puede muy bien fundamentar un recto ecologismo, puede consultarse la obra El sufrimiento humano según Santo Tomás, de Javier Mahillo Monte, Ed. del Autor. Tesis doctoral presentada en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Navarra, Pamplona España 1989.

(13) FERNÁNDEZ, Aurelio: Teología Moral II: moral de la persona y de la familia, Ediciones Aldecoa, Burgos España 1993, p. 778.

(14) HUGON, Eduardo, O.P: Las veinticuatro tesis tomistas, versión castellana de Adriano Suárez, O.P. Editorial Porrúa, S.A., Col. "Sepan cuantos...", México 1974, p. 49

(15) AQUINO Tomás de: Opuscula Philosophica, Marietti, Turín 1954, pp. 205-217. Traducción castellana de Los cuatro opuestos, por Juan Cruz Cruz en "Anuario Filosófico" Universidad de Navarra, España VII (1974) pp. 13-46.

(16) "De aquí que perteneciendo la privación, por todo cuanto es en si misma, al género del no-ente -pues por su propia naturaleza está abocada al extremo menos noble de la contradicción, que es el mayor opuesto- y dado que se separa de lo primero, un extremo de la contradicción tiene como término el sujeto y el género por privación; así pues, la privación se opone esencialmente a un ser en el sujeto, al igual que en la contradicción el ser absoluto es aquello a lo que primaria y esencialmente se opone el no ser" AQUINO Tomás de: Opuscula Philosophica, Marietti, Turín 1954, pp. 205-217. Traducción castellana por Juan Cruz Cruz en "Anuario Filosófico" Universidad de Navarra, España VII (1974) pp. 16-17.

(17) "La potencia se dice por relación al acto. Pero el acto es doble, a saber, el acto primero, que es la forma, y el acto segundo, que es la operación; y según parece el nombre de acto se aplicó en primer lugar a la operación, pues tal es el sentido más obvio de la palabra acto, y en segundo lugar se aplicó a la forma, pues la forma es el principio y el fin de la operación. Y de modo semejante es doble también la potencia, a saber, la potencia activa, que corresponde al acto que es la operación, y es el sentido primario de la palabra potencia, y la potencia pasiva , que corresponde al acto que es la forma, y que es el sentido secundario y derivado de dicha palabra" AQUINO, Tomás de: De Potentia, q. 1, a. 1.

(18) AQUINO, Tomás de: De principiis naturae, traducción castellana de Salvador Abascal de Los principios de la realidad natural, Editorial tradición, México 1975, p. 29.

(19) Ibídem.

(20) " Parte de todo dolor es, digámoslo así, la sobra del dolor o su reflejo: el hecho de que no sólo sufres, sino que debes seguir pensando acerca del hecho de que sufres. No sólo vivo penando cada día interminable, sino que vivo cada día pensando acerca de vivir cada día penando" y "¿Son estas notas las contorsiones insensatas de un hombre que se niega a aceptar que nada que no sea sufrir podemos hacer con el sufrimiento? ¿Que sigue creyendo que hay algún medio (si sólo pudiera hallarlo) que hace que el dolor deje de ser dolor? En realidad no importa si te aferras a los brazos del sillón del dentista o dejas que tus manos descansen sobre tus piernas. El taladro sigue taladrando" LEWIS, C.S.: Una pena observada, versión castellana de Oscar Luis Molina S. Ed. Andrés Bello, 3a. edición, Chile 1995, pp. 23 y 47

(21) En palabras de Aquino, probablemente se afirmaría que la enfermedad es una privación, pues es la salud es un habito entitativo propio del cuerpo vivo, sin embargo creo que con el avance de los conocimientos médicos, sin faltar al espíritu si no a la letra del Aquinate, podemos hacer una distinción entre lo que constituye una enfermedad por privación a la que puede estar provocada por la co-existencia de elementos ajenos a nuestra constitución orgánica. 

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