MALTRATO INTRAFAMILIAR A LA MUJER ANCIANA  (Tesis)

 

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Psicólogo Clínico
Jefe del
  Departamento de Psicogerontología del Complejo Gerontológico del Hospital Docente Clínico Quirúrgico Dr. Salvador Allende, del Municipio Cerro en Ciudad de La Habana.

Miembro de la Comisión de la Ética Médica, de la Comisión de Ética para las Investigaciones Científicas y de la Comisión de Terapia sexual, además Profesor Auxiliar Adjunto a la Universidad de La Habana. 

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SÍNTESIS

Se realizó un estúdio descritivo de corte transversal para determinar la existencia o no de maltrato intrafamiliar hacia las mujeres ancianas ingresadas en el Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende, residentes en el Municipio Cerro de la Ciudad de la Habana, desde el 1ro de  Octubre del 2005 al treinta de Julio del 2006. Previo consentimiento informado las 115 féminas que conformaron  la muestra respondieron una encuesta  sobre malos tratos, evidenciándose que poseían una clara noción acerca de los mismos, además los ilustraron  de forma coherentes.  El 41,73% de las participantes reconocieron haber sido victimas directas de malos tratos por  algún familiar y el 61,73% presencio acciones violentas sobre otras personas. El maltrato psicológico fue el más frecuente  y dentro de este la falta de respeto, también se puso de manifiesto el interés mayoritario de las damas porque se divulguen en los medios de comunicación sus causas y  consecuencias.


ÍNDICE

Capitulo I: Introducción

Capitulo II: Marco teórico

Capitulo III: Objetivos

Capitulo IV: Diseño Metodológico

Capitulo V: Análisis y discusión de los resultados de la investigación

Capitulo VI: Conclusiones

Capitulo VII: Recomendaciones

Capitulo VIII: Referencias Bibliografícas

Anexos

 

CAPÍTULO 1

INTRODUCCIÓN

El envejecimiento poblacional es un fenómeno palpable en numerosas partes del mundo de manera especial en nuestro país, donde hay una amplia cobertura y calidad de los servicios de salud, una significativa disminución de la mortalidad infantil y un similar  aumento de la esperanza de vida, con su consecuente impacto en la elevación del nivel de vida de la población en general (1, 2).

Envejecer es un proceso natural, genéticamente programado, de transformaciones biológicas y psíquicas, con amplias repercusión en la esfera de relación del individuo, hasta el momento es irreversible y se comporta de manera distinta en cada ser humano. No obstante, una  porción significativa de la humanidad necesita conciencia clara de que somos seres envejecíentes pues, por ejemplo, muchos se sorprenden al ser llamados a la oficina de personal, del centro laboral, para recibir la sugerencia  de ir pensando en la jubilación, pues ya tienen edad suficiente. A partir de este momento la palabra viejo suele provocarles inquietud, pues vivimos en un mundo que idolatra la juventud, la belleza juvenil, la salud y el dinero. Quien no posea estos atributos  es considerado un ciudadano de segunda categoría y su consecuencia es la discriminación, que  constituye la base para la violación de los derechos humanos de cualquier persona a cualquier edad. (3,4)

Durante los años sesenta  del  pasado siglo fue ganando justo espacio en la consciencia social el tema de los malos tratos a los niños y a las mujeres, diversas organizaciones gubernamentales o de otro tipo, han sido creadas en distintas partes del mundo y algunos recursos se han destinado  a la solución de este fenómeno, del cual no queda exento ningún estado, sociedad, clase, nivel socioeconómico, profesión, grupo social o etário, religión, raza y sexo. Sin embargo, solo a partir de la década del ochenta del siglo pasado, de manera   muy cautelosa, comienza a tratarse el tema del maltrato y el abandono en los ancianos, reconociéndose que este sector de la población  es también de elevada vulnerabilidad   a ser maltratado. (5)

La violencia orientada a las personas ancianas no es un fenómeno nuevo, ha existido siempre y puede ser comparada a un iceberg, por cada caso que se conoce, cientos permanecen ocultos, de tal modo que la incidencia real  se desconoce, los reportes son muy variables y poco confiables, en EEUU uno de cada 25 viejos son maltratados, Canadá reporta del 1 al 20%, Inglaterra el 3.2%,  en México se calcula el 35%. España, en  1999,  reportó  una prevalencia del 25.9%. Por otra parte   la magnitud del problema tiende a aumentar a medida que una proporción mayor de la población alcanza edades más avanzadas. (6,7)

Los países de América Latina con mayor índice de maltrato a los ancianos, en orden descendiente, son: Colombia, Brasil y Panamá, donde se informan al año más de 102 mil casos de extrema violencia, de los cuales un 37.15 % de los maltratados son ancianos. En Argentina y Chile este fenómeno se ha venido incrementando desde hace más de tres décadas y para el 2009 se prevee que más de 33 600 adultos mayores sufran algún tipo de violencia dentro del seno familiar. (8, 9,10)

 

La familia a manera de eje central de la vida desempeña un papel fundamental en el desarrollo del hombre, por ello constituye una institución social difícil de asociar con la violencia. El maltrato a los viejos en el medio intrafamiliar es poco visible, pues ocurre a puertas cerradas y tanto la victima como el victimario, por lo general, se encargan de guardar bien el secreto. (11, 12, 13)

Los malos tratos a los ancianos se producen en familias de todos los niveles socioeconómicos, aunque suele ser más frecuente en sociedades que sufren crisis económica e inestabilidad social, donde el delito y la explotación tienden a crecer. En general, se puede afirmar que la mujer anciana y pobre se encuentra en la situación más vulnerable. (14,  15)

Abordar el abuso de las personas de edad avanzada requiere un enfoque multisectorial y multidisciplinario en el que se impliquen todos los sectores sociales, la justicia, los trabajadores sanitarios y sociales, los líderes sindicales y espirituales, las instituciones religiosas, las organizaciones políticas y de masas, la policía y las propias personas mayores. Es necesario un esfuerzo continuo para aumentar la conciencia pública del problema y modificar los valores que perpetúan las desigualdades de sexo y las actitudes discriminatorias contra los ancianos. (15)

El apoyo social, las oportunidades para la educación y el aprendizaje continuo durante toda la vida, así como la paz y la protección frente a la violencia y el abuso son factores fundamentales del entorno social que mejoran la salud, la participación y la seguridad a medida que las personas envejecen. (15)

Cuba, a pesar de ser un país socialista, con un amplio programa de atención y  seguridad social, no es ajena a la violencia  domestica, en este sentido el estado y la sociedad civil se esfuerzan denodadamente  por la prevención y solución de este fenómeno. Sin embargo, el maltrato orientado a las personas de más edad, en opinión de este autor, que cuenta con una década de experiencia asistencial en el área de la psicogerontología, es un evento cotidiano  en no pocos hogares cubanos que aún permanece en espera de análisis  más profundos y  soluciones efectivas. (16)

La Constitución de la República de Cuba,  expresa la voluntad política del Estado cubano, para eliminar toda forma de discriminación y opresión por razones de clase, género y raza; nuestras leyes  amparan  la niñez, la juventud y la familia. Sin embargo la isla no cuenta con una ley específica que refrende las manifestaciones de violencia intrafamiliar, como es el caso de algunos países de la región de América Latina y el Caribe. Los especialistas en jurisprudencia opinan que la legislación y política social cubanas ofrecen un marco, que aunque susceptible de perfeccionamiento,  garantiza el respeto de los derechos humanos de los miembros del grupo familiar, paso previo para la eliminación de cualquier forma de violencia u opresión. (16,17)

La ley cubana no define  la violencia intrafamiliar, y ante sus manifestaciones se procede según  lo establecido en el Artículo 116 de la Ley de Procedimiento Penal.  (16,17)

Los órganos competentes encargados de tomar medidas legales, represivas y preventivas son: los Tribunales Populares en sus niveles municipales y provinciales, la Dirección de Menores y la Policía Nacional Revolucionaria, la Comisión de Prevención y Atención Social, y las Casas de Orientación a la Mujer y a la Familia auspiciadas por  la Federación de Mujeres Cubanas. Es necesario destacar que  las  medidas de protección no aparecen  reflejadas en ningún cuerpo legislativo vigente. (16)

 

En nuestro país no existen  investigaciones dedicadas al estudio exclusivo de  la violencia intrafamiliar hacia la mujer anciana, ellas han forman parte de sondeos con muestras de ambos sexos y como en el resto del mundo  existe un subregistro estadístico importante que no facilita el conocimiento claro y preciso de este fenómeno. (19,20)

Con frecuencia, en la consulta externa o en la sala de ingreso del Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende, atendemos a mujeres ancianas del municipio Cerro de la Ciudad de la Habana victimas del maltrato infligido en el medio intrafamiliar y del cual, a veces, no tienen conciencia o deciden no hablar por pena o miedo, confiando a Dios o la vida la solución del problema, por lo general esta información no queda  registrada y en consecuencia el fenómeno se enseñorea en nuestros hogares. Se considera que las ancianas por ser mujeres, viejas y estar en desventaja económica, son más vulnerables, que los hombres del mismo grupo de edad, a los malos tratos. Todo esto impulso la idea del siguiente problema científico:

 ¿Existe maltrato intrafamiliar hacia las mujeres ancianas ingresadas en el Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende?

Preguntas científicas:

1.      ¿Cuáles son los principales planteamientos teóricos en la literatura científica acerca del maltrato a las personas de la tercera edad?

2.           ¿Qué acciones  son valoradas como maltratos por las ancianas?

3.           ¿Las ancianas se consideran victimas de malos tratos?

4.           ¿Cuál es la forma más frecuente de maltrato?

5.           ¿Cuáles son las conductas más frecuentes frente al maltrato?

Justificación

Vivimos en un país que avanza aceleradamente hacia el envejecimiento poblacional y se preocupa por mejorar la calidad de vida de los ancianos. La violencia en general y el maltrato intrafamiliar a las personas ancianas en particular es un fenómeno oculto y en ascenso, con repercusiones directas en la salud física y mental de las victimas. Las mujeres de la tercera edad, según las estadísticas, sobreviven a los hombres y por sus desventajas económicas y sociales en el pasado, presentan una mayor  vulnerabilidad a este fenómeno en el presente. Mientras exista un anciano maltratado la sociedad debe tomar medidas adecuadas ya que el asunto es grave con independencia de la incidencia.

 

CAPÍTULO 2

MARCO TEÓRICO                    

La violencia doméstica es tan antigua como la humanidad misma,  en la actualidad se  reconocen la violencia contra los niños,  las mujeres y los ancianos, siendo este último grupo una población en ascenso por las mayores expectativas de vida de los últimos años. Como resultado, se supone que el número de personas ancianas maltratadas se incremente, dada la falta de preparación social e individual para enfrentar este envejecimiento poblacional, masivo y acelerado. (1,  15) 

Historia

Los pueblos de la antigüedad, tuvieron actitudes de abandono hacia las  personas ancianas en épocas de sequías o guerras; pero por lo general  eran veneradas como seres humanos  de gran  valor. “En muchas comunidades, los ancianos tenían gran importancia en cuanto a toma de decisiones. En África se han conservado esas tradiciones de manera que aún hoy, en los países ya independientes, siguen siendo fundamentales los criterios y la participación de los viejos “que han acumulado sabiduría”. (1,  20) 

Las tribus nómadas de Norte América y los esquimales aceptaban que los individuos envejecidos, cuando perdían las  habilidades productivas por ellos desarrolladas, se apartaran del grupo para sucumbir a expensas de las inclemencias, la inanición o devorados por los depredadores. (21,22)

En Chile, las tribus Yagas, con precaria subsistencia tenían en elevado aprecio por sus mayores, mientras que los nativos de la isla de Tonga, en Oceanía, con estable economía imponían onerosos maltratos sobre las personas de más edad (1,   21,22).

En el imperio Inca el papel de los adultos en la vejez era cambiante y sus funciones variaban  hasta llegar, en el ocaso de la vida, a fungir  como espantapájaros en los campos de cultivo. (23)

Según Hipócrates,  en la Grecia antigua, cuando se tenía la suerte de llegar a  la tercera  edad, se le ofrecía al geronte una celebración, y posteriormente lo  precipitaban desde lo alto de un risco, pues el resto de su vida sería una “enfermedad crónica e incurable”. No obstante con los ancianos se tenían  importantes consideraciones sociales, por ejemplo ocupaban los puestos claves en las asambleas populares donde el pueblo daba gran valor a sus consejos y apreciaciones, en las flotas de guerra los comandantes, por lo general, eran los marinos de más edad y se les denominaba  navarcas.      (4,  20)

Los ciudadanos romanos consideraron a las personas ancianas verdaderas instituciones. La figura del”pater” era respetada en sus facultades de potestad, cualquiera que  fuese su edad. En la política surgió el Senado, que era el Consenso de Ancianos, cuya influencia en el desarrollo del imperio fue trascendental. (4,  20)

En la Edad Media comienza a usarse el concepto de jubilación para evitar, en lo posible, las prácticas difundidas, por entonces, de abandono y expulsión de los ancianos de sus hogares (24, 25).

Durante el llamado “Siglo de las Luces” el parricidio se puso de moda en las cortes de la época. (26)

Hasta la actualidad, la sociedad mundial, machista y patriarcal se ha debatido en  una insoluble dicotomía: por un lado, el trato honorable a los hombres ancianos con poder económico, social y político, expresado en miedo o respeto, veneración  y subordinación. A grado tal, que no pocos jóvenes idealizan  a estos poderosos gerontes,  ansiando llegar a la tercera edad para ser tratados con veneración; incluso se esfuerzan por aparentar ser físicamente mayores, ya que el hombre adulto es  una garantía de respetabilidad. Por otra parte se distinguen los malos tratos a las personas ancianas con pobre solvencia económica, limitadas condiciones productivas y/o gran necesidad de cuidados, especialmente a las mujeres de sesenta años o más, triplemente discriminadas por  ser del “sexo débil”, pobres y ancianas. (27, 28)

 Durante los  últimos 50 años el enfoque  sobre lo valioso de la edad ha variado significativamente. Se idolatra  lo joven, lo bello, lo eficaz en términos productivos y comerciales modernos. Poco a poco a surgido una forma de maltrato psicológico, basado en la desvalorización, por el sólo transcurso de los años (6).

 

Literatura

 En las Sagradas Escrituras Hebreas, fuente de la que bebieron tres de las más importantes religiones monoteístas del mundo  el Judaísmo, el cristianismo y el Islam, se utiliza la palabra “Zaken”, que en lengua hebrea significa vejez, pero también sabio o decano. Y se relatan asombrosas epopeyas  protagonizadas por personas longevas, escogidas por Díos para liderar a su pueblo (29,  30).

El antiguo testamento, conjunto literario conformado por escritos de diversos autores, es abundante en señalamientos éticos dirigidos a prevenir el maltrato orientado a las personas ancianas, así en el quinto de los Diez Mandamientos  se advierte “Honra a tu padre y a tu madre, para que vivas una larga vida...”, y en libro Eclesiástico, el texto por excelencia de instrucción a los nuevos creyentes, se aconseja “Hijo mío, empéñate en honrar a tu padre; no lo abandones mientras tenga vida. Aunque su inteligencia se debilite, se comprensivo con el, no lo avergüences mientras viva”. (20,  30)

La monumental obra teatral de los Antiguos Griegos refleja los conflictos generacionales existentes en la sociedad de entonces, como se representa  en la Trilogía edípica de Sófocles. (31)

 En la literatura clásica posterior, Shakespeare, E. Zola, H. de Balzac, D. Buzzati, A. Biay Caseres, se exponen  los conflictos intergeracionales,  de los viejos víctimas y los viejos odiosos. (31)

 “El viejo y el mar”, novela de ambiente cubano,  que le valiera el Premio Novel de literatura al escritor E. M. Hemingway, en i954, narra la asombrosa historia de un pobre y viejo pescador que cada día se hace solo a la mar, en una frágil embarcación, luchando contra los elementos por la subsistencia. En uno de sus monólogos el viejo marino  nos deja un optimista  mensaje, antídoto contra los maltratos y  las adversidades de la vida “un hombre puede ser destruido, pero jamás derrotado”. (32)

S. Freud sostuvo la idea de que la etapa edípica  básica, en el desarrollo psicológico de cualquier individuo, es equivalente al parricidio primario en el que los jóvenes de la tribu asesinaron  al padre y luego lo devoraron para terminar con su tiranía en la horda patriarcal. Es decir la estructura psíquica sobre la que se construye la personalidad, según este autor,  tiene su origen en un hecho simbólico de naturaleza violenta perpetrado sobre un anciano (33).    

 Según la literatura médica existente las primeras publicaciones sobre maltrato en las personas  ancianas de las cuales se  tiene conocimiento, como parte de la violencia familiar, se publicaron en 1975 en el British Medical Journal de Inglaterra, donde aparecen  los primeros testimonios de médicos y enfermeras que atendían pacientes ancianos maltratados por sus familiares; por entonces G. R. Burston define el  “Síndrome de la  Abuelita Golpeada”. (31, 34)

 

Acciones sociales

Hacia los años 80, del pasado siglo, se realizan toda una serie de investigaciones sobre el maltrato a los ancianos en Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos, en el  primer país mencionado  se origina el interés por la temática, sin embargo en los dos últimos la conciencia pública y profesional es mayor y se le dedican considerables recursos  tanto en el ámbito investigativo como en el político. Por ejemplo en  EEUU se crea el “Centers for elderly abuse” que contribuye de manera fundamental al análisis de dicho fenómeno y el Congreso de esta nación lo conceptualiza. Ha partir de los 90 se observó una paulatina incorporación de otros estados al estudio del tema, como: Dinamarca, Noruega, Suecia, Finlandia, Irlanda, Francia, Hong Kong y Australia. (31)

En 1994, con el patrocinio de la International Association of Gerontology, se crea la “Comisión Latinoamericana de Prevención del Maltrato en la Vejez”, cuya sede radica en Buenos Aires capital de La  Argentina. (35)

En 1996 la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Naciones Unidas consideró necesario que el grupo de las personas ancianas fuese apoyado y reconocido como sujeto de derecho, tanto para el esclarecimiento de su problemática, como para denunciar la  discriminación a que es sometido, creándose  la Comisión " Los Adultos Mayores y sus Derechos", que  entre sus objetivos prioritarios se propuso: (36)

1) El respeto por los Derechos Humanos de quienes han dado y siguen dando tanto. (36)

 2) La desmitificación de perjuicios y  falsas creencias, que implican  una representación social denigrante de la vejez. (36)

3) La capacitación de recursos humanos, la más eficaz herramienta que permitirá crear conciencia en la sociedad sobre un tema poco conocido. (36) 

Posteriormente en 1998 como resultado del trabajo de dicha comisión se elabora el Programa “Violencia, abuso y maltrato de la vejez” para la lucha contra este flagelo. (37)

Naciones Unidas en 1999, denominado “Año Internacional de las Personas Mayores”,   propone la idea de “una sociedad para todas las edades” a partir del pleno reconocimiento de los derechos de las  personas ancianas, señalando que las sociedades que valoran la justicia social deben esforzarse por asegurar que todas las políticas y prácticas mantengan y garanticen los derechos de todas las personas, sin tener en cuenta su edad. (6)

La Organización Mundial de la Salud , en  Ginebra, en el año 2002, reconoce que ha llegado el momento de instaurar un nuevo paradigma que considere a los viejos participantes activos de una sociedad capaz de  integrar el envejecimiento y los valore contribuyentes activos y beneficiarios del desarrollo. El paradigma del Envejecimiento Activo posee un enfoque intergeneracional, pues aprecia  la importancia de las relaciones familiares y el apoyo que se prestan entre sí los miembros y las generaciones en una familia.  Señala la autentica necesidad de asumir planes y conductas basados en los derechos, las necesidades, las preferencias y las capacidades de los ancianos. Dicho concepto  se basa en el reconocimiento de los derechos humanos de las personas de la tercera edad y en los principios de las Naciones Unidas de independencia, participación, dignidad, asistencia y realización de los propios deseos. (6)

 

Conceptualización de Maltrato

La palabra violencia viene del latín “Vislatus”, significa fuerza y Latus es un participio pasado del verbo “Ferus” cuyo significado es llevar o transportar.  (38)

Para la Real Academia de la lengua española, la violencia es, por una parte, “una acción impetuosa o efecto de violentarse. Impetuosa por hacerse con repugnancia, furia o ira. Es la aplicación de medios violentos a cosas o personas para vencer su resistencia y/o producir un daño”. Así mismo define que el maltrato es “tratar mal a uno de palabras o de obra”. (39)

 Un interesante y cada vez mayor flujo de publicaciones e investigaciones acerca de la violencia ejercida contra las personas ancianas ha tratado de acercarse al tema, abordando aquellas manifestaciones que perjudican la integridad, física, sexual y psicológica, de las mismas, así como su bienestar material y financiero. Para esta aproximación se han empleado diferentes definiciones de Abuso y Maltrato, las  primeras son más utilizadas en las publicaciones de lengua inglesa, mientras que las segundas son comunes en los textos de habla hispana. (40)

La revisión de la literatura especializada refleja que no existe un consenso, entre los autores, en cuanto a los aspectos que debe abarcar la definición  de maltrato y si coinciden en reconocer la poca claridad de las mismas. Para la investigadora M. Hudsón, desde 1978 numerosos investigadores han tratado de aproximarse al tema del maltrato en las personas ancianas, no obstante, según ella, “la comprensión de este fenómeno todavía está en los primeros pasos” (41).

Las primeras definiciones apuntaban a las necesidades no atendidas de las personas ancianas ya que provenían de investigaciones  que hurgaban en la situación de carestía  en que se encuentran  los individuos  más marginados. Por su amplitud este  concepto  fue abandonado (40).

El Congreso de los EEUU, en el año 1985, define técnicamente el abuso como “…deseo de infligir daño, confinamiento injustificado, intimidación o castigo cruel que de origen a daño físico, dolor o angustia mental. También, deseo por parte del cuidador de privar a los ancianos de los alimentos o servicios que le resulten necesarios para evitar el daño físico, la angustia o el daño mental” (41, 42)

Por su parte la American Medical Association, en 1987,  definió el maltrato a las personas ancianas como “toda acción u omisión que lleva como resultado un daño o amenaza de daño contra la salud o el bienestar de la persona anciana”. Esta definición incluyó el maltrato, físico, psicológico y económico. (43)   

 

Un año antes, en 1986, habían visto la luz  dos importantes conceptualizaciones  acerca del maltrato, Valentine y Cash lo definen “como aquellas situaciones no accidentales en las cuales un anciano sufre daño físico, deprivación de sus necesidades básicas o daño psíquico como resultado de un acto o una omisión por parte de quien debe cuidarle”. Algunos de sus admiradores le adicionaron las afectaciones económicas. Beaucheming, por su parte enfoca los malos tratos a los ancianos como “la coacción física y psicológica ejercida sobre una persona. La violencia, según este autor cubre dos aspectos: (44)

a) Negligencia: que consiste en  no atender las necesidades de las personas de edad, tanto a nivel psíquico, físico, afectivo como espiritual. (44)

b) Maltrato: que es el daño para la salud o el bienestar de una persona anciana. (44)

La 41 Asamblea Médica Mundial celebrada en  Hong Kong, en Septiembre de 1989, considero en su declaración “El maltrato de ancianos se puede manifestar de diversas maneras, como físico, psicológico, financiero y/o material, maltrato médico o auto abandono. Las diferencias en la definición de maltrato de ancianos presentan dificultades al comparar las causas y naturaleza del problema”. (45) 

Hutson, en el año 1991, desarrolla una taxonomía en base a una encuesta Delphi de más de 100 investigadores, médicos y educadores que operan en el campo del maltrato del anciano, planteando la siguiente definición: “El maltrato del anciano es una conducta destructiva que está dirigida a una persona mayor , ocurre en el contexto de una relación que denota  confianza y reviste suficiente intensidad y/o frecuencia como para producir efectos nocivos de carácter  físico, psicológico, social y/o efectos financieros de innecesario sufrimiento. Lesión, dolor, pérdida y/o violación de los derechos humanos y disminución de la calidad de vida de la persona anciana”. En esta definición se incluyen actos de comisión y omisión, intencionales o no. También incorporan dos nuevos elementos “frecuencia” e “intensidad” que en definitiva, según la autora, determinan la presencia de maltrato. En el curso de este mismo año la investigadora señala que el  significado esencial del concepto de maltrato a las personas de la tercera edad “son culturalmente determinados, valoricamente cargados, emocionalmente establecidos y tienen ramificaciones éticas, por lo tanto el acuerdo de definiciones es difícil y algunas veces inapropiado”. De lo que se infiere que los criterios para calificar como maltratante una conducta varían de un contexto sociocultural a otro. (41)

 

Al año siguiente el Grupo de Estudio del Consejo Europeo analizó y rechazo todas las definiciones de maltrato existentes hasta ese momento y planteo la existencia de tres dimensiones en el maltrato intrafamiliar a los viejos: (46)

Primer nivel: Decidieron considerar como familia a cualquier individuo relacionado con la persona anciana “por sangre, matrimonio o cohabitación”. (46)

Segundo nivel: La violencia fue conceptualizada como “cualquier acto u omisión” que pueda ser dañino. (46)

Tercer nivel: Consideraron como persona anciana aquellas “por o sobre la edad nacional de retiro”. (46)

Posteriormente el grupo de estudio reconoció las variaciones nacionales y culturales en la comprensión del término maltrato. En lo que a violencia se refiere estableció que “… la definición y el diagnóstico depende de los valores subjetivos de juicio de cada investigador y los encuestados involucrados” y sugirieron definir abuso y  malos tratos como “acto no accidental u omisión que menoscaba la vida, la integridad física o psicológica de una persona anciana  o que amenaza seriamente el desarrollo de su personalidad o afecta o daña su seguridad financiera”. (40)

Por esta misma época Hudson y Yohnson, señalan que las definiciones existentes de abuso a las personas mayores tienen carácter “extrínseco” ya que se limitan a describir el fenómeno, para ellos es necesario el empleo de términos analíticos o “intrínsecos” que especifiquen la naturaleza moral y social del problema. (40)

Apoyándose en la Semiología y en la Antropología social Johns y sus colaboradores (1991), señalaron que lo erróneo del abuso no radica en la tipología, sino en el contenido del acto, dependiente de la situación cultural y del juicio de valor que se le da al mismo. Con el objetivo de comprender la dinámica de la violencia toman  los  argumentos de Riches (1986) con relación al triangulo básico de la violencia, que contempla  a la victima, al victimario y a las personas que observan la acción violenta. (40)   

En 1996 la 43 Asamblea Mundial de la Salud nuevamente aborda este problema  y adopta la resolución WHA 4925 en la que se declara que la violencia es un problema creciente de la Salud Pública  a nivel mundial desarrollándose sobre todo en el hogar, centro de trabajo, instituciones médicas y sociales, además de valorarse otros tipos de violencia a mayor escala como el terrorismo y la guerra. (37)

López Pérez (López, 1996), conceptualizó el maltrato como “Toda acción, intencionada o no que produzca  daño desde el punto de vista biológico, psicológico, social, financiero, material y las conductas negligentes, ya sean de forma transitoria o permanente” (37).

 

Clasificaciones del maltrato

Maltrato Físico

Cualquier forma de agresión intencionada, realizada a una persona anciana, que le produzca daños físicos, como lesiones, quemaduras, desfiguración y muerte. Algunos autores incluyen en este subtipo el abuso sexual dado por: cualquier forma de intimidación sexual realizada sin el consentimiento del anciano (31,   49).

 

Maltrato Psicológico

Toda conducta que provoque angustia en el anciano, como: amenazas de castigo o de llevarlo a una institución en contra de su voluntad, ignorarlo, confinarlo de forma injustificada a cama o butaca, aislarlo socialmente, no responder a sus inquietudes, utilizar la palabra viejo en forma despectiva para referirse a el, o abuelo, infantilizarlo, entre otros. (31,   49, 50, 51)

El maltrato psicológico es un conjunto heterogéneo de comportamientos que producen agresión psíquica y causa un perjuicio a la víctima. Puede ser intencionado o  no, es decir, el agresor puede tener conciencia de que está haciendo daño a su víctima o no tenerla. Eso es desde el punto de vista psicológico. Desde el punto de vista jurídico, tiene que existir la intención del agresor de dañar a su víctima (47).

 La amenaza se distingue de la agresión, pero  es una forma de agresión psicológica. Cuando la amenaza es dañina o destructiva directamente, entra dentro del campo de la conducta criminal,  que es penada por la ley. (47)

El maltrato psicológico es un anuncio de violencia física, pero, muchas veces es peor, ya que su anuncio es una amenaza suspendida sobre la cabeza de la víctima, que no sabe qué clase de agresión va a recibir y  vaya o no acompañada de esta, actúa en el tiempo. Cuanto más tiempo persista, mayor y más sólido será el daño.

No se posible hablar de maltrato psicológico mientras no se mantenga durante un plazo de tiempo. Un agravio puntual, el menosprecio, una palabra o una mirada ofensiva, culpabilizadora, son un ataque psicológico, pero no lo que entendemos por maltrato psicológico (47).

Para que el maltrato psicológico se produzca, es preciso, por tanto, tiempo. Tiempo en el que el verdugo asedie, maltrate o manipule a su víctima y llegue a producirle la lesión psicológica. Esa lesión, sea cual sea su manifestación, es debida al desgaste. La violencia, el maltrato, el acoso, la manipulación producen un desgaste en la víctima que la deja incapacitada para defenderse. (47)

Por sus características las formas de maltrato psicológico pueden agruparse en tres  categorías: (47)

·             Maltrato pasivo:

Falta de atención hacia la víctima, cuando ésta depende del agresor, como sucede con los ancianos en cualquier situación de dependencia de la víctima respecto al agresor. Un ejemplo lo constituye el abandono emocional, senescentes abandonados por sus familias en instituciones y jamás reciben una visita, una llamada o una caricia. (47)

·             Maltrato activo:

Trato degradante continuado que ataca a la dignidad de la persona. Los malos tratos emocionales son los más difíciles de detectar, porque la víctima muchas veces no llega a tomar conciencia de que lo es. Otras veces toma conciencia, pero no se atreve o no puede defenderse y no llega a comunicar su situación o a pedir ayuda. (47)

·            Acoso Psicológico:

Violencia que se ejerce sobre una persona, con una estrategia, una metodología y un objetivo, para conseguir el derrumbamiento y la destrucción moral de la víctima. Acosar psicológicamente a una persona es perseguirla con críticas, amenazas, injurias, calumnias y acciones que pongan cerco a la actividad de esa persona, de forma que socaven su seguridad, su autoafirmación y su autoestima e introduzcan en su mente malestar, preocupación, angustia, inseguridad, duda y culpabilidad. (47)

 

Maltrato Espiritual

Toda conducta que implique desconocer los valores religiosos, estéticos, culturales y políticos del anciano, así como interferir en el libre ejercicio de los mismos. (31)

 

Maltrato Social

Todas las acciones que propendan al no reconocimiento del anciano como figura de valor, ejemplo: no ceder el puesto en el ómnibus, no ayudarlos a cruzar la calle, excluirlos, no tener en cuenta sus gustos en los programas, etc. (31,   49)

 

Maltrato Financiero-material

Todo uso inadecuado de los recursos de un anciano para beneficio de otro. Ejemplo: utilización indebida de su pensión, obligarlo a firmar documentos sin su consentimiento por no estar capacitado mentalmente para hacerlo, proporcionarle una atención suboptima en su propio domicilio. (31,  49)

 

Maltrato Societario

Se refiere a falta de adecuadas políticas sociales  y de salud, mal ejercicio e incumplimiento de las leyes existentes,  y presencia de normas sociales, comunitarias y culturales que desvalorizan la imagen del adulto mayor, que resultan en perjuicio de su persona y se expresan socialmente como discriminación, marginalidad y exclusión social. (21,  49)

 

Violencia estructural

En la configuración arquitectónica de la mayoría de las casas donde viven los mayores, no se tiene prevista ni la adaptación ni la seguridad que posibiliten la autonomía de la vida.  (48, 49)

Negligencia

Toda acción de descuido intencional o por desconocimiento que pueda provocar pérdida de peso, deshidratación, falta de higiene, visión o audición deficiente sin corrección, agudización de patologías crónicas por retiro de medicamentos necesarios sin consulta previa que provoque dolor físico, exceso de medicamentos indicados por facultativos que conllevan riesgo para el anciano (31,   49).

 

Factores de riesgo asociados al maltrato a las personas ancianas

Factores individuales

Investigaciones recientes han aclarado que quienes aplican violencia física en el medio familiar sufren con probabilidad  problemas de personalidad y trastornos  asociados al abuso sustancias psicoactivas (49, 52).

Estudios anteriores indicaban que el deterioro cognitivo y las dificultades físicas de los ancianos eran factores de riesgo para ser victimisados, pero investigaciones más recientes han establecido que la fragilidad de los gerontes maltratados no es diferente a la de los no afectados e incluso podía ser  menos significativa, principalmente en los casos de maltrato psíquico y verbal (49).

Comparaciones de cohorte de pacientes con enfermedad degenerativa de tipo Alzhaimer han permitido inferir que el deterioro no constituye un factor de riesgo de maltrato, sin embargo los casos denunciados  a las autoridades corresponden, de manera significativa, a personas muy ancianas y depauperadas. (53, 54)

Otro factor a tener en cuenta en el maltrato a los viejos es el de  los ingresos económicos, en especial si el victimario tiene hábitos tóxicos que pueden llevarlo a timar al geronte, además de las dificultades económicas que el perpetrador puede afrontar. El resentimiento de los miembros de la familia por los gastos que entraña la atención al senescente puede desempeñar un papel en  este tipo de maltrato. (49)

 

Factores relacionales

A partir de la evidencia científica acumulada no se descarta que el estrés tenga cierto protagonismo en la comisión de actos violentos contra los ancianos,  sin embargo los especialistas prefieren valorarlo en un contexto mas amplio, teniendo en cuenta que la calidad de la relación entre el anciano y el cuidador es un factor importante,  por lo que se cree que el estrés puede ser un factor co-ayudante en los casos de maltrato, pero, por si solo no puede explicar el fenómeno. (49)

El trabajo con pacientes demenciados ha evidenciado que las acciones violentas, de quienes reciben la atención, pueden actuar como factor desencadenante de la violencia correlativa al cuidado. El maltrato puede ser la consecuencia de la acción simultánea de diversos factores entre los cuales se hallan el estrés,  las características de la  relación anciano - cuidador, las conductas turbulentas, la agresión proveniente del sujeto cuidado,  así como la depresión del cuidador. (49)

Condiciones de vida inadecuadas, como el hacinamiento y la falta de privacidad, se asocian a los conflictos familiares, considerándose que las conductas maltratantes son más frecuentes  entre quienes conviven. También se  valoran las relaciones de tipo dependiente, fundamentalmente las enmarañadas interdependencias entre la victima y el victimario, en las que existe un fuerte vinculo entre ambos, que en cuantiosas ocasiones obstaculiza la intervención de terceros. (49)

 

Factores comunitarios y sociales

Prácticamente en todas las investigaciones, el aislamiento social resulta una forma de maltrato significativa en los ancianos, además de que puede ser causa o consecuencia del mismo y tener  como fin único el aislamiento del anciano por dificultades físicas o mentales. (49)

Los factores sociales en la actualidad se consideran significativos  factores de riesgo del maltrato a los ancianos en los países ricos y pobres. Hoy se reconoce que los patrones culturales y las tradiciones,  entre los que se encuentran los estereotipos acerca de la vejez, del sexo y el genero, así como la cultura de la violencia,  desempeñan un papel importante en la concepción de que los ancianos son frágiles, débiles y dependientes, por tanto, poco merecedores de los fondos del estado e incluso de la atención familiar. (49)

Los estudios sobre el maltrato a los ancianos se  habían centrado, hasta ahora, en los conflictos interpersonales y familiares, pero existe la propuesta  de un modelo ecológico que integra las posiciones individuales, interpersonales, comunitarias y sociales, reduciendo las  limitaciones de enfoques anteriores, también considera las dificultades de todo tipo que enfrentan los ancianos, quienes por lo general no pueden satisfacer necesidades perentorias sin contar con el apoyo de la familia lo que eleva el riesgo de maltrato. (49)

 

Teorías que tratan de explicar el maltrato

Numerosos investigadores,  han planteado  diferentes modelos que intentan explicar el maltrato a las personas ancianas. (40)

·             Teorías de orientación sociológica:                                                  

Desde una perspectiva sociológica, hay que considerar en particular dos enfoques teóricos que pueden facilitar el análisis del maltrato a las personas ancianas y tratan de exponer los elementos que subyacen en este fenómeno:

·             Teoría de la interacción social

Concede atención especial a las relaciones de los ancianos con aquellas personas que le apoyan en su cuidado, considerando que el envejecimiento biológico y social modifica el papel de las personas mayores en sus grupos sociales de pertenencia y de esta forma cuestiona su identidad personal y genera tensión en sus relaciones sociales. En este sentido, considera que los cambios consecutivos al envejecimiento, tanto a nivel físico como psicológico inducen una modificación en la forma en que los sujetos se perciben a sí mismos (autoconcepto) y son percibidos por la sociedad (imagen), a la vez que pueden generar una repuesta de rechazo social que de lugar a la aparición de actitudes discriminativas y a comportamientos abusivos hacia los senescentes. (15)

Señalan que el paso del tiempo y sus consecuencias repercuten de forma negativa en el auto concepto y sobre todo en la imagen de las personas mayores, afectando  las habilidades relacionales de los viejos y el modo en que el envejecimiento incide en los cuidadores y trabajadores vinculados a los ancianos. Con frecuencia estas personas los  aprecian como una experiencia poco gratificante de la cual se derivan estereotipos negativos frente a la vejez, los cuales pueden ser proyectados incluso en la percepción del propio envejecimiento. En general puede decirse que esta teoría se focaliza en la manera particular en que los individuos se adaptan y responden a la etapa de la vejez como parte del ciclo vital. (15)

·             Teoría de la economía política

Considera que la dependencia en la vejez se deriva de la exclusión forzada de los mayores del ámbito laboral lo que deviene  en pobreza, dependencia económica e institucionalización, simultáneamente reconoce la construcción social del abuso y la influencia del mismo en las dinámicas familiares y los grupos sociales. Es decir, para los partidarios de esta teoría, el maltrato surge a partir de las vías por las cuales la sociedad y los servicios que se ocupan de los mayores, marginan a las personas de más edad y se considera que la predisposición de las personas a maltratar se incrementa a partir de las fuerzas sociales que discriminan tanto a los mayores como a aquellas personas encargadas de su cuidado, deduciéndose que la solución del problema debe ser considerada tanto un asunto de política social como un aspecto que atañe a las disfunciones familiares en todas sus dimensiones. Este enfoque teórico ofrece una significación mayor a la influencia de la sociedad en los senescentes tanto en el seno familiar como fuera de él. (15)

La valía de ambos postulados teóricos  reside en la contextualización de las contradicciones entre cuidadores y ancianos en la esfera de las ideologías políticas y los recursos socioeconómicos, estimando que numerosas experiencias negativas de la vejez son  consecuencia de la división social del trabajo. (15)

·             Teoría del aprendizaje social o de la violencia transgeneracional

Plantea  que la violencia se aprende por lo tanto es probable que niños maltratados cuando crezcan se conviertan en maltratadores de sus padres. (40)

·            Teoría del cansancio del cuidador

 El maltrato y la negligencia aparecen cuando los factores estresantes tanto externos como relacionados directamente con el cuidado superan un determinado umbral en el cuidador, produciéndose el llamado “Cuidado Inadecuado”. Desde este punto de vista no hay nada intrínsecamente violento en la familia, se decir el maltrato aparece cuando los individuos son personalmente incompetentes para cuidar. (40)

·            Teoría del aislamiento

 La ausencia de redes sociales es un factor de riesgo para recibir  maltrato y negligencia. (40)

·            Teoría de la dependencia

Establece que la fragilidad funcional (pérdida de la autonomía) por enfermedades crónicas, demencias etc., son condiciones de riesgo para que se dé el maltrato. (40)

·            Teoría de la psicopatología del maltratador.

 Aducen  que el agente del maltrato posee características de personalidad patológicas (Esquizofrenia, RM, ideas paranoides, alcoholismo). (40)

 

Coincidencias teóricas

Se aprecia entre los especialistas el consenso, de que la violencia intrafamiliar se genera por conflictos internos, que son condicionados por el contexto histórico, social  y  político en el que se desarrolla la misma. (15)

El envejecimiento demográfico se considera un factor de segundo orden en el aumento de la conducta abusiva hacia los ancianos, en cambio, se le concede relevancia primordial a la  magnitud de los recursos asignados para hacer frente a la vejez  poblacional y a la ausencia  social de  claras definiciones normativas que garanticen el cuidado óptimo de los ancianos. (15)

Entre  las dimensiones psicológicas de mayor  influencia en la manera de envejecer esta la imagen de la vejez que cada individuo posee, la cual se conforma a partir de la representación social preponderante del viejo. En la construcción de esta imagen intrapsíquica  intervienen las experiencias personales en interacción con las ideas y creencias provenientes del acervo cultural, las relaciones sociales, la ideología de base, los intereses  económicos y los aportes de la ciencia. (15)

Occidente proyecta una imagen sombría de la vejez, caracterizándola como una etapa de pérdidas psicológicas, deterioro psíquico,  cambios biológicos desfavorables y retiro forzoso de la actividad laboral, sin una definición socio-cultural de las actividades específicas de las personas jubiladas y cuyo desempeño los haría sentirse útiles, obtener reconocimiento social y elevar su autoestima. Ofrece, pues, un perfil de incapacidad, inutilidad social y  rigidez que lleva a la llamada ideología del viejísimo. (15)

Las representaciones sociales constituyen el consenso normativo que regula las expectativas, actitudes y conductas de las personas más jóvenes hacia los ancianos como categoría social y de ellos hacia sí mismos como grupo e individuos .Por tanto se infiere que el maltrato a las personas mayores es una de las formas en que se manifiesta la existencia de una imagen negativa de la vejez y el envejecimiento, a través de la cual se emplean conductas abusivas de diversa índole. (15)

Podnieks identificó como elementos esenciales en el surgimiento del maltrato y la negligencia hacia los ancianos por parte de los cuidadores  las siguientes situaciones: (15)

§             Las actitudes negativas hacia los ancianos.

§             La carencia de conocimientos acerca del proceso de envejecimiento.

§             La falta de preparación de las personas dedicadas al cuidado de los ancianos.

§             La falta de oportunidades de promoción para los profesionales.

Las actitudes hacia los ancianos están relacionadas con la manera de percibirlos, lo que a su vez es un indicador importante de la calidad de los cuidados que reciben. Es evidente que la gerontofobia existe y tiene consecuencias significativas tanto en el trato como en la atención sanitaria que se les brinda a los senescentes, especialmente cuando los recursos económicos son limitados, se argumenta que representan uno de los factores contribuyentes en la aparición del maltrato, lo cual se acentúa en aquellos casos portadores de algún grado de dependencia que les hace más vulnerables de sufrir conductas abusivas. (15)

En la actualidad se considera  importante ampliar el espectro de la atención inadecuada a los senescentes, de forma que abarque tanto a las redes formales como informales.  Señalándose  que las actitudes negativas hacia los viejos suelen ser más frecuentes en los servicios asistenciales de permanencia prolongada, como resultado de la mayor concentración de ancianos en un mismo lugar y de la escasa preparación de los cuidadores, entre otros factores. (15)

La sociedad no ha logrado una representación social positiva y justa de la ancianidad, ya que se rechaza todo lo que es viejo. Por otra parte, en la representación social intervienen no solo otros sectores poblacionales, sino además participa de manera activa el propio envejeciente, quien la hace suya y a través de ella se autodefine. De esta forma la sociedad define qué es la vejez y cómo debe ser viejo. (15)

 

Posición del autor

Para la realización de la actual investigación fue elaborada una definición de maltrato a las personas de la tercera edad, ajustada a la visión ideológica  del autor con relación a dicho fenómeno, así como a las características del medio sociocultural en que se desarrolló el estudio.

 

Maltrato

Cualquier acción u omisión no accidental que por su naturaleza y/o significación, en un contexto sociocultural determinado, ocasione daño a la salud psíquica, espiritual, social  y/o biológica, así como, menoscabo del bienestar material y/o económico de la persona anciana, implicando pérdida de los derechos humanos y de la calidad de vida, poniendo en riesgo el desarrollo armónico de su personalidad, con independencia del grado de conciencia, intensidad, duración y frecuencia de una u otra.

En esta conceptualización se destacan las siguientes características del maltrato:

1.      Se establece que el maltrato puede ser   resultado tanto de una acción como de una omisión, no accidentales.

2.      Un evento puede ser maltratante  tanto, por su naturaleza (Agresiva o amenazante) como  por el significado que la acción o la no acción tenga para el individuo afectado y la sociedad.

3.      El significado o la connotación de la acción maltratante están determinados, en gran medida,  por el contexto sociocultural en que se encuentra el sujeto, por eso, en algunas culturas puede considerarse como maltrato lo que para otras no es visto como tal.

4.      Hace alusión al  daño que el maltrato ocasiona a la salud psíquica, espiritual, social, sexual y/o biológica, así como menoscabo del bienestar material y/o económico de la persona anciana. Clasificando de esta forma los tipos de maltrato.

5.      Se Introduce el  maltrato espiritual para destacar las  acciones u omisiones que laceran los sentimientos religiosos o de otra índole, que venimos  observando con cierta frecuencia en nuestra experiencia clínica. 

6.      Se reconoce que  el maltrato implica una  violación  de los derechos humanos de la persona maltratada, así como la afectación de su calidad de vida.

7.      Valorando el proceso de desarrollo de la personalidad como un continuo, que solo concluye con la muerte y la tercera edad como una etapa del mismo, en la que surgen nuevas formaciones psicológicas,  se valora al maltrato como un estimulo externo de origen social que, por su naturaleza agresiva o amenazante,  afecta la evolución armónica de esta formación psicológica  durante el envejecimiento.

8.      Se aclara que las afectaciones tienen lugar con independencia  del grado de conciencia, duración, frecuencia e intensidad de la acción u omisión.

 

Para este autor el maltrato es multicausal en su surgimiento, desarrollo y consecuencias. En cualquier situación, tanto  familiar, como social, intervienen numerosos determinantes y condicionantes:

1.            El medio intrapsíquico de cada uno de los implicados, que  incluye: autovaloración, autoestima, imagen de sí mismo, concepción del mundo, necesidades, motivaciones, intereses, actitudes, hábitos,  conflictos, capacidades intelectuales y de aprendizaje, ideología,  ideales morales, creencias religiosas, etc.

2.            Patologías psiquiátricas tanto de la victima como del victimario, estado cognitivo, retraso mental, adicciones, presencia de distrés, etc.

3.            Características físicas, enfermedades invalidantes, minusvalías, etc.,  tanto del cuidador como de la persona cuidada.

4.            Las relaciones interpersonales entre anciano y cuidador: la historia de esas relaciones, las interdependencias entres los protagonistas de la situación de maltrato, capacidad de reconocimiento y agradecimiento del anciano hacia las personas que lo cuidan, etc.

5.            El medio intrafamiliar, con sus pautas de interacción, crisis relacionadas o no con el ciclo vital, la comunicación entre sus miembros, las normas de comportamiento, roles y limites, espacios físicos y psicológicos, conflictos pendientes, historia familiar y nivel de funcionabilidad.

6.            Condiciones materiales y económicas del anciano y sus cuidadores.

7.            La comunidad con y su capacidad de aceptación de los miembros más envejecidos, tradiciones, relaciones interpersonales, barreras de todo tipo, etc.

8.            La sociedad: estereotipos acerca de la vejez, los patrones de comportamiento social, programas de atención social y de salud a la ancianidad, capacidad de respuesta ante el envejecimiento poblacional, tanto en políticas como en el suministro de los recursos necesarios para la atención adecuada del anciano en las redes informales, normas estrictas de respeto a los derechos humanos y que regulen el  cuidado de las personas ancianas. Es importante incluir el papel de los medios masivos de comunicación y de las organizaciones políticas y de masa.

9.            Instituciones geriátricas y gerontológicas con adecuadas condiciones materiales, abastecimiento suficiente, equipamiento conveniente y preparación optima  de proveedores de cuidados y servicios, con permanente prevención del síndrome bornout.

10.       La cultura y las tradiciones, incluyendo la gerocultura del envejecimiento.

El deterioro de cualquiera de estos factores, por si solo puede convertirse en una importante causa de maltrato a los ancianos, sin embargo lo típico es el  menoscabo simultáneo de dos o más de ellos. Sin esta visión, en opinión de este autor, es imposible comprender el fenómeno del maltrato y por tanto encontrar estrategias y tácticas efectivas de enfrentamiento, tanto a nivel individual como social.


CAPÍTULO 3

OBJETIVOS

Objetivo general:

Determinar la existencia o  no de maltrato intrafamiliar hacia las  mujeres ancianas  del Municipio Cerro ingresadas en el Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende, desde el 1ro de  Octubre del 2005 al treinta de Julio del 2006.

Objetivos específicos:

1.      Identificar los principales planteamientos teóricos en la literatura científica acerca del maltrato a las personas de la tercera edad.

2.      Determinar la concepción que del término maltrato poseen las ancianas de la muestra, tanto de manera global, como del orientado a las personas de la tercera edad.

3.      Precisar si las ancianas de la muestra se consideran victimas de maltratos directos. 

4.      Identificar  los tipos de maltrato predominantes.

5.      Determinar las respuestas más comunes frente al maltrato,  de las ancianas victimizadas.


CAPÍTULO 4

DISEÑO METODOLÓGICO

Diseño:

Estúdio descritivo de corte transversal.

Métodos teóricos y técnicas

·                   Análisis y síntesis

División del todo en sus múltiples relaciones y componentes, así como la  posterior unión de los mismos, para descubrir las relaciones esenciales y características generales.

·                   Histórico – lógico

Para determinar los antecedentes históricos del maltrato en las mujeres ancianas e investigar las leyes generales y esenciales del funcionamiento y desarrollo de este fenómeno.

·                   Análisis documental

Para determinar los fundamentos teóricos y metodológicos  que sirvieron de base a la realización de la investigación.

Método empírico

·                   Encuesta

Para recoger  información sobre el maltrato a las ancianas en el medio intrafamiliar.

 

Universo:

Ancianas ingresadas en el Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende desde el 1ro de  Octubre del 2005 al treinta de Julio del 2006.

Muestra:

La muestra quedo conformada por 115 ancianas cuyas edades oscilan entre los 65 y 89 años. El promedio de edad general fue 74.4 años y el de escolaridad de 6,1 grados.

Definición de términos

Sexo: se considero solo al sexo femenino.

Mujeres Ancianas: Mujeres de sesenta años o más.

Edad: se agruparon en los siguientes grupos de edades: 65 a 69, 70 a 74, 75 a 79, 80 a 84 y de 85 a 89.

Nivel escolar: Se consideraron: Primaria terminada, Primaria no terminada, Secundaria básica terminada, Secundaria básica no terminada, Técnico medio y Universitario

Estado civil: contemplamos casada, soltera, viuda y divorciada.

Nacionalidad: cubana y otras.

Convivencia: Solo, con cónyuge, con  familia y otros.                                 

Situación laboral: Jubilado, Trabajador activo y Trabajador  por cuenta propia.

Condiciones económicas: buenas, regulares y malas.

 

Maltrato:(Elaborada al efecto). Cualquier acción u omisión no accidental que por su naturaleza y/o significación, en un contexto sociocultural determinado, ocasione daño a la salud psíquica, espiritual, social  y/o biológica, así como, menoscabo del bienestar material y/o económico de la persona anciana, implicando pérdida de los derechos humanos y de la calidad de vida, poniendo en riesgo el desarrollo armónico de su personalidad, con independencia del grado de conciencia, intensidad, duración y frecuencia de una u otra.

Maltrato Físico: (Elaborada al efecto).cualquier forma de agresión intencionada o no, realizada a una persona anciana como:

a)     Golpes, lesiones, empujones, pellizcos, tirones de pelos, arañazos,  laceraciones,  asfixiamiento, escupidas, quemaduras, desfiguración y muerte, baños a temperaturas extrema, etc.

b)     Demora y/o negación de prestación de servicios y auxilio. Intervenciones médicas injustificadas y/o desmedidas, así como, el suministro de medicamentos y sustancias psicoactivas sin prescripción facultativa o violando las indicaciones del especialista que las indicó, etc.

c)     Invasión del espacio físico, visual, acústico y sonoro del anciano, etc.

d)     Interferencia en la realización de necesidades básicas como alimentación, evacuación, aseo y sueño, etc.

e)     Impedir la ejecución de actividades físicas, etc.

f)       Desplazamiento de lugares tradicionales o habituales, confinamientos, restricciones  e institucionalización, injustificadas e involuntarias, etc.

 

Maltrato Psicológico: (Elaborada al efecto).Toda conducta que:

a)     Lastime la autoestima de la persona  anciana como: un trato inferior, subestimación, infantilización, lástima,  utilización de lenguaje impropio e irrespetuoso, denigración, devaluaciones, burlas, críticas, intolerancia ante sus limitaciones, etc.

b)     Desconozca  sus gustos, necesidades, motivaciones e intereses. Violación de su espacio y límites psíquicos, etc.

c)     Interfiera en el proceso de comunicación: creando barreras y obstáculos, no ayudarlo a garantizar el estado óptimo de los canales de acceso a la información,  emplear dobles mensajes, contenido amenazantes en los mismos, ambigüedad y falta de claridad y no escucharlo con atención activa . Preferir la imposición a la persuasión. Aislarla, así como, insuficientes manifestaciones de afecto y cariño, etc.

d)     Limite su desarrollo intelectual y cognitivo anulando  sus capacidades de aprendizaje y creatividad: ya sea mediante el uso de sustancias psicoactivas, deprivación  sensorial o no garantizando un ambiente estimulante y motivante, etc.

e)     Genere tristeza, depresión, ansiedad o angustia  por alusiones tendenciosas e injustificadas acerca de la muerte y las enfermedades. Desvirtuar u ocultar  informaciones médicas, así como, no facilitar su comprensión por parte del anciano. Sobreprotección. Etc.

y      Maltrato Espiritual: (Elaborada al efecto).Toda conducta que interfiera o impida la manifestación libre y adecuada de ideales, valores, sentimientos, creencias y actitudes de carácter, religiosas, políticas, filosóficas, estéticas y culturales de los ancianos. Negar u obstruir las vías de acceso al ejercicio de los mismos. Destruir o desaparecer imágenes, iconos, y bibliografía. Amenazarlos con daños, brujerías. Acciones discriminativas o segregacionistas por causas de sus principios en alguno de los campos antes mencionados, etc.

 

Maltrato Social: (Elaborada al efecto).Toda acción u omisión dirigida a:

a)     Impedir o interferir la participación activa de la persona  anciana en actividades, eventos o procesos sociales. Oponerse a que pertenezca a organizaciones y grupos sociales con los cuales se siente identificado

b)     No permitirle el establecimiento de relaciones interpersonales, recibir visitas y/o tener confidentes fuera del marco familiar.

c)     No reconocer a la persona  anciana como una figura de valor, ejemplo: no cederle el puesto en el ómnibus, no ayudarlos a cruzar la calle, excluirlos, no tener en cuenta sus gustos en los programas, etc.

 

Maltrato Sexual: (Elaborada al efecto).Impedir la libre expresión de la sexualidad personal:

a)     Oponiéndose a la manifestación de sentimientos y relaciones amorosas, a que se divorcie o separe de  la pareja, a que contraiga nuevas nupcias, etc.

b)     Violando la intimidad y la privacidad sexual de la persona anciana. Etc.

c)     Acoso y violación sexual.

 

Maltrato Financiero-material: (Elaborada al efecto). Uso inadecuado de los recursos de la persona anciana:

a)     Manipulación, apropiación, dilapidación, o destrucción inconsulta de sus recursos materiales y monetarios, incluida la  jubilación, la pensión o la ayuda económica que  reciba, etc.

b)     Estafarla, extorsionarla, engañarla o chantajearla, etc.

c)     Obligarla a firmar documentos sin su consentimiento por no estar capacitada mentalmente para hacerlo, proporcionarle una atención suboptima, etc.

 

Maltrato Negligencia: (Elaborada al efecto). Toda acción de descuido intencional o por desconocimiento que pueda provocar pérdida de peso, deshidratación, falta de higiene, visión o audición deficiente sin corrección, agudización de patologías crónicas por retiro de medicamentos necesarios sin consulta previa que provoque dolor físico, exceso de medicamentos indicados por facultativos que conllevan riesgo para el anciano.

 

Deterioro cognitivo: (Elaborada al efecto). Alteración de las capacidades intelectuales de la persona entre las que se destaca el deterioro de la orientación, de la memoria reciente del razonamiento, del cálculo, del lenguaje, de la facultad de realizar tareas complejas y de la capacidad de programación, entre otras. La perturbación de tres o más de las facultades anteriores se considera Deterioro Cognitivo.

 El Deterioro Cognitivo se puede clasificar según la puntuación obtenida test Miniexamen Cognitivo de Folstein en:

§        Deterioro Cognitivo Significativo: 0 a 24 puntos.

§        Deterioro Cognitivo No Significativo o Fisiológico: de 24 a 30 puntos.

y      Enfermedad psiquiatría: cualquiera de las entidades incluidas en el Glosario Cubano de Psiquiatría, en su tercera revisión.

y      Las conductas  de las ancianas frente al maltrato, propio y presenciado,  fueron clasificadas del modo como sigue:

§        Activa: Realizar la denuncia, testificar.

§        Pasiva: Involucrarse emocionalmente, sin  conducta activa de respuesta.

§        Indiferente: No mostrar implicaciones afectivas ni conductuales.

y      Familia: Cualquier individuo relacionado con la persona anciana por sangre, matrimonio o cohabitación. (25)

 

Descripción de los instrumentos utilizados

Entrevista exploratoria no estructurada

Dirigida a la búsqueda de patologías  psiquiátrica y/o minusvalías visuales y auditivas. 

 

Mini Mental State Examination

Test psicometrico que consta de 11 preguntas cuyo objetivo es determinar si existe algún grado de Deterioro Cognitivo. Esta prueba es considerada un marcador neuropsicológico en el diagnostico de las demencias y en especial de la Degenerativa por enfermedad de Alzheimer.

Pregunta No1: Explora la orientación temporal (5 ptos).

Pregunta No 2: Explora la orientación espacial (5 ptos).

Pregunta No 3: Explora  Memoria de fijación (3ptos).

Pregunta No 4: Explora atención y calculo (5 ptos).

Pregunta No 5: Explora Memoria de reproducción (3 ptos).

Pregunta No 6: Explora Lenguaje/Nomenclatura (2 ptos).

Pregunta No 7: Explora Reproducción de frases (1 pto).

Pregunta No 8: Explora Programación de acciones (3 ptos).

Pregunta No 9: Explora Comprensión de ordenes (1 pto).

Pregunta No 10: Explora Lenguaje escrito (1 pto).

Pregunta No 11: Explora Reproducción de dibujo (1 pto).

Puntuación Máxima: 30 puntos, por debajo de 23 puntos no se incluían en la muestra ya que se consideraba poco confiable.

 

Encuesta  Sobre Abuso y Maltrato

Elaborada, en 1995, por  las autoras argentinas, Susana Aguas, Marcela Bertone, Norma  Lew y Patricia Guido. Consta de 24 preguntas abiertas y cerradas. La prueba  se  estructuro de forma intencional  para lograr que el sujeto llegue desde su sistema de valores y creencias acerca  del maltrato, al compromiso emocional, así como a  las posibles conductas a ejecutar. Comienza con interrogantes sobre datos generales hasta la pregunta  nueve, en la diez se interesa  por la conceptulización, personal, del maltrato en general y luego en la tercera edad: indaga sobre posibles maltrato recibidos y la reacción tras el mismo, por la resistencia de la personas  a verbalizarlo. Las preguntas diecisiete y dieciocho exploran  si la anciana conoce a “otras” personas victimas de malos tratos y el comportamiento posterior de estas. Cerrando la encuesta se  hace una pegunta para indagar el nivel de involucración personal en el tema a partir de los a portes de la encuestada.

 

Procedimientos

Procedimiento de aplicación

Después de obtener el consentimiento informado de las ancianas y aclararles que se trata de una investigación sobre maltrato familiar, el siguiente paso, en la etapa de aplicación, fue realizar una entrevista individual explorando la presencia o no de antecedentes psiquiátricos en las ancianas, de existir, la  persona no formaba parte del estudio.

Posteriormente a las ancianas se  les aplicó, de manera individual, el Miniexamen Cognitivo de Folstein  para conocer si presentaban Deterioro Cognitivo Significativo que, también, se tomo como criterio de exclusión.

Por ultimo, después de solicitarles su consentimiento para integrarlas al estudio, se procedió a la aplicación individual de la Encuesta  Sobre Abuso y Maltrato elaborada, en 1995, por  los autores S. Aguas, M. Bertone, N.  Lew, P. Guido.

 La información  obtenida se depositó en una base datos para su almacenamiento, organización y posterior clasificación.

Procesamiento y análisis de la información

El procesamiento estadístico de la información acopiada se realizó  de forma manual con calculadora y en el análisis se empleo la estadística descriptiva, con distribución de frecuencias, medidas de tendencia central y porcientos. Posteriormente se  empleo de una computadora  Pentium IV, con ambiente de Windows XP, procesándose los textos con Word XP, y los gráficos y tablas se ejecutaron con Excel XP.


CAPÍTULO 5

ANÁLISIS Y DISCUCIÓN DE LOS RESULTADOS 

Tabla 1 Edades

Edad

Sujetos

   %

65 - 69

  29

 25,21

70 – 74

  35

 30,43

75 – 79

  26

 22,6

80 – 84

  15

 13,04

85 - 89

  10

 8.,9

Total

  115

 100

Fuente: encuesta

                            

Grafico 1

                 

En la tabla 1 se observa que las edades de las 115 ancianas encuestadas oscilan entre los 65 y 89 años. El subgrupo de edad con mayor número de personas es el de 70 – 74 años, con 35 (30,43%) mujeres, le sigue el de 65 a 69, con 29 (25,21%) senescentes y después el de 75 – 79, con 26 (22,6%) sujetos. El subgrupo menos numeroso lo constituyo el de 85 – 89 años, con 3 (8,3%) féminas. El promedio de edad de la muestra fue de 74,4 años.

En algunas investigaciones con sujetos de ambos sexos el grupo de edad con mayor frecuencia relativa el grupo de 70 a 79 años y en otras, el de 60 a 69.

El municipio Cerro, donde  se efectuó esta  investigación es el más envejecido del país, con el 22% de las personas con 60 años o más, previéndose  un aumento continuo e irreversible del envejecimiento poblacional del área por el progresivo descenso de la fecundidad y el mejoramiento de la calidad de vida. La Ciudad de la Habana, por su parte, tiene el 15.6% de los senescentes del país con 60 años y más, el  13,7% para hombres y 17,4% para las mujeres por lo que se puede considerar que esta proporción estratificada guarda relación aproximada con el número de ancianos de las áreas de salud donde se obtuvo el muestreo al azar. (54,55)

Se afirma que  75 de cada 100 cubanos que nacieron en el 2005 van a vivir más allá de los 60 años, infiriéndose que   Cuba será uno de los países más envejecidos del mundo lo que implica un gran desafió en la esfera familiar, social y económica  (56)

Los datos estadísticos anteriores alertan acerca de la problemática que puede experimentar el Cerro, la ciudad y el país con relación al maltrato si atendemos al criterio de que un aumento del número de viejos implica un incremento de los malos tratos hacia este sector poblacional.     


Tabla 2 Estado civil

    E. civil

  Sujetos

 %

Casadas

15

13,04

Solteras

 26

 22,6

Viudas

 55

 47,2

Divorciadas

 19

 16,2

Total

115

 100

Fuente: encuesta  

Grafico 2

En la tabla 2 se aprecia las viudas, 55 (47,2%) damas, resultaron ser las más numerosas, seguidas de las solteras, con 26 (22,6%) ancianas. Revelaron ser divorciadas 19 (16,52%) féminas y declararon estar casadas 5 (13,8). Es importante  destacar que el 86,1%, (13 sujetos), de la muestra, por una u otra razón no tiene pareja.

La magnitud numérica   de las ancianas viudas se corresponde con la tendencia mundial a que las mujeres vivan más años que los hombres, dado que la tasa de mortalidad de estos es más significativa  que la de las féminas. (58, 59)

Tabla 3 Nivel escolar

N. escolar

 Sujetos

 %

Prim. Terminada

60

52,17

Prima. No terminada

19

16,52

Sec. Básica terminada

6

5.,1

Sec. Básica no terminada

15

13,04

Técnico medio

11

9,56

Universitario

4

3,47

Total

115

100

Fuente: encuesta

Grafico 3

En la tabla 3 se observa que  cesto grado es el nivel escolar de 60 (52,17%) mujeres investigadas, primaria no terminada declararon 19 (16,52%) ancianas, noveno grado 6 (5,21%) senescentes y secundaria básica no culminada 15 (13,04%) damas. Técnico medio 11(9,56%) señoras y estudios universitarios concluidos 4 (3,47%) féminas.

Antes de 1959 el  Cerro  era un municipio constituido fundamentalmente por familias muy humildes sin acceso a la educación, cuyos hijos desde edades  tempranas, tenían que contribuir al sustento económico familiar, en especial las mujeres,  para quienes los trabajos reservados eran lavado y planchado para la calle y el de domestica, esto determinó que aquellas niñas y jóvenes de entonces, sean las ancianas de hoy con una escolaridad de seis grados o menos. 

Al revisar bibliografía internacional se aprecia que el bajo nivel cultural  constituye  un significativo factor de riesgo social, ya que el nivel de instrucción académico implica mejor calidad de vida, mayor autoestima, adecuadas habilidades sociales,  etc. (60, 61)

 

Tabla 4 Convivencia

Convivencia

sujetos

%

Solo

29

25,21

C/cónyuge

15

13,04

Familia

67

58,26

Otros

4

3,47

Total

 115

100

Fuente: encuesta

Grafico 4

En la tabla 4 se aprecia que viven con su familia 67 (58,26%) personas encuestadas y no comparten la vida con nadie 29 (25,21%) féminas. Dentro de los marcos de la relación conyugal se desarrolla la vida de 15 (13,04%) señoras y conviven con familia sustituta 4 (3,47) mujeres.

Al verificar las variables sociodemográficas del Cerro se evidenció  predominio  del estado civil casado, sin embargo  en la muestra no resulto así, en opinión de este autor porque  la ancianidad en pareja tiene repercusiones positivas para la salud y la calidad de vida, al establecerse nexos  intergeneracionales muy sólidos de ayuda mutua y afectividad que no son sustituibles con el afecto y el apoyo de otras personas, auque sean familiares. (58, 59)

 

Tabla 5 Situación laboral

Situación laboral

sujetos

%

jubiladas

67

58,26

Peritadas

6

5,21

Pensionadas

7

6,08

Amas de casa

35

30,04

Pensionadas

115

100

Fuente: encuesta

 

Grafico 5

En la tabla 5 observamos a 67 (52,26%) mujeres, de la muestra, jubiladas. Amas de casa, expresaron ser 35 (30.4%) damas, pensionadas 7 (6.08%) féminas y peritadas 6  (5.  21).

El elevado número de amas de casa, apreciable en la muestra, se debe a las pocas oportunidades laborales existentes antes de 1959 para la mujer cubana y a las tradiciones machistas de la sociedad, de manera fundamental. 

En el mundo  desarrollado el incremento demográfico tardó con relación al desarrollo económico, brindando mayores oportunidades a los jóvenes,  lo que redundó en una mejor solvencia monetaria en la vejez. En los países tercermundistas, el envejecimiento poblacional aventaja al crecimiento de la economía, por tanto las personas viven más años, pero con una precaria calidad de vida y un elevado riesgo social, de lo que se infiere mayor  vulnerabilidad a los maltratos. (60,61)

 

Tabla 6 Situación económica

Situación económica

Sujetos

%

Buena

33

28,69

Regular

76

66,08

Mala

6

5,21

Total

115

100

Fuente: encuesta

Grafico 6

En nuestro país  es voluntad política del estado que al término de la vida laboral, cada ciudadano disfrute de la jubilación lo que aparece reflejado en la muestra estudiada. Además la  Asistencia y Seguridad Social cubren las necesidades más acuciantes de los ancianos, pero dadas las condiciones económicas del país a partir de la caída del campo socialista y el recrudecimiento del bloqueo impuesto por EEUU, y a pesar de haber elevado en varias ocasiones el monto económico de las pensiones y  jubilaciones, aun no se logran satisfacer totalmente las necesidades materiales de este sector de la población. (62, 63)

 

Tabla 7 Organizaciones de la tercera edad

Organizaciones

Sujetos

%

Pertenecen

42

36,52

No pertenecen

73

63,47

Total

115

100

Fuente: encuesta 

Grafico 7

En la tabla 7 solo 42 (36,52%) ancianas se encuentran incorporadas a los Círculos de Abuelos, el resto de los integrantes de la muestra, 73 (63,47%) señoras, no están integradas a organizaciones que respondan a los intereses de las persona de la tercera edad, de hecho, no existen muchas más. En nuestro medio solo actúan algunos sindicatos de jubilados, en determinadas empresas, y la Universidad del Adulto Mayor, a las que nunca han asistido las mujeres encuestadas. La pobre incorporación a los Círculos de Abuelos hay que buscarla en la disminución de las actividades recreativas de los mismos y en el aumento sensible de médicos de familia y los técnicos deportivos que se encuentran cumpliendo misiones internacionalistas.

 

Tabla 8 Maltrato General

Términos empleados

Sujetos

 %

“Que te falten el respeto”

55

47,82

“Que empleen el golpe”

44

38,26

“Que te digan malas palabras”

44

38,8

“Que  griten cuando te hablan”

42

36,52

“Que te insulten”

22

19,13

“Que no traten bien a la gente”

15

13,04

“Que no hagan caso cuando le hablas a alguien”

15

13,04

“Que no respeten el derecho ajeno”

13

11,3

“Que te empujen en las colas”

3

2,6

Fuente: encuesta 

En la tabla 8 se aprecia que el grupo de ancianas encuestadas para definir el maltrato hacia las personas de cualquier edad empleó, entre otras, las siguientes frases:

§         Que te falten el respeto”, 55 (47,82%).

§         Que empleen el golpe”,44 (38,26%).

§         Que  griten cuando te hablan”, 42 (36,52%).

Tomando como referencia los términos empleados, por las mujeres encuestadas y las ejemplificaciones expuestas por ellas, puede afirmarse que conocen de qué platican cuando se refieren al término maltrato y que sus conceptualizaciones al respecto están estrechamente vinculadas a las características sociales, económicas y culturales del medio en que se desenvuelven.

Resalta  la frecuencia con que emplearon la frase “falta de respeto”, (47,82%), haciendo alusión, en opinión de este autor,  a un estado  generalizado de insatisfacción personal con relación al trato que recibe la mujer anciana de otros individuos.

Las situaciones utilizadas para ejemplificar, en todos los casos, fueron congruentes con la idea de maltrato que cada una conceptualizó.

En la muestra estudiada por López Pérez (López, 1996) el 37,1% de los ancianos se referían al maltrato como las malas acciones dadas  por comportamientos inadecuados de los jóvenes, problemas entre familias, tratos bruscos gestos despectivos e ignorar a los viejos, entre otros y al analizar este aspecto atendiendo al género las ancianas se referían a malas acciones, injusticia y falta de afecto. (21) 


Tabla 9 Maltrato en la vejez

                              Maltrato

Sujetos

%

“Que le falten el respeto a los viejos”

29

25,21

“Que hables y no te hagan caso”

22

19,13

“Que les griten”

19

16,52

“Que no se ocupen de sus necesidades”

13

11,3

“No tener en cuenta que son los dueños”

13

11,3

“Que les digan malas palabras”

10

8,69

“Que los dejen solos”

10

8,69

“Que se burlen de los viejos por su problemas”

6

5,21

“Que no los saluden”

6

5,21

“Engañarlos”

3

2,6

“No cederles el asiento en la guagua”

3

2,6

“Aprovecharse de sus dificultades para robarles”

1

0,86

Fuente: encuesta

En la tabla 9 las expresiones más empleadas para definir el maltrato en la vejez fueron las siguientes:

¡      “Que le falten el respeto a los viejos”, 29 (25,21%).

¡      “Que hables y no te hagan caso”, 22 (19,13%).

¡      “Que les griten”, 19 (16,52%).

¡      “Que no se ocupen de sus necesidades” y “Que hagan cosas en la casa sin tener en cuenta que son los dueños” 13 (11,3%) respectivamente.

Como puede apreciarse la frase “falta de respeto” asoma con  reiterada frecuencia (25,21%) y emergen nuevas expresiones vinculadas a la ocupación de otras personas por  las necesidades de los ancianos, a que no se respete la condición de los gerontes como propietarios, con el 11,3% de las menciones respectivamente y la negación del  saludo a los senescentes, (5,21%), etc.

Los ejemplos aportados por las ancianas ilustraron de manera adecuada las definiciones de maltrato.

En términos generales puede asegurarse que las ancianas encuestadas definieron, de manera adecuada el maltrato orientado a los viejos, aunque de manera muy circunscrita al medio sociocultural en el que se desenvuelven y a sus propias problemáticas.

El 27,9% de las ancianas de la muestra investigada por de López Pérez (López, 1996) lo definen como desprecio hacia los viejos. (21) 


Tabla 10 Maltrato directo

Maltrato directo

Sujetos

%

Si

48

41,73

No

67

58,26

Total

115

100

Fuente: encuesta

Grafico 8

Cuarenta y ocho sujetos de la muestra, (41,73%), plantearon haber sido victimas de malos tratos y el resto, 67 (58,26) encuestados, señalaron que no. Esto puede estar condicionado, en opinión de este autor, por las dificultades de los ancianos para reconocer tales tratos en sus propias familias, por la pena que les genera. En investigación similar realizada con ancianos de ambos sexo por López Pérez (López, 1996), el 38,6% de los sujetos reconocieron haber sido objeto de maltratos directos y en estudio  de Rodríguez, E. (Rodríguez, E., 2002) se señala que todos los sujetos habían recibido maltrato social y que la mayoría también fue victima de abusos familiares y que  los familiares con quien conviven son quienes más los maltratan. (21,  64)

 

Tabla 11 Tipos de maltratos sufridos y su clasificación

Tipos de maltratos sufridos

Clasificación

Sujetos

%

Falta de respeto

M. Psicológico

22

45,83

Gritos

M. Psicológico

16

33,33

Equipos  con  volumen elevado

M. Psicológico

12

25

Disminuir los problemas de salud

M. Psicológico

10

20,83

Soledad

M. Psicológico

10

20,83

No preocupación por sus gustos

M. Psicológico

8

16,6

No prestarle atención al hablar

M. Psicológico

5

10,4

Obstaculizan su alimentación

M. Físico

4

8,33

No acompañarlas al medico

M. Físico

2

13,3

No respetar su religión

M. Espiritual

2

13,3

No contar ellas

M. Psicológico

1

6,6

Desconfiar del  dolor

M. Psicológico

1

6,6

No saludar

M. Psicológico

1

6,6

Empujones

M. Físico

1

6,6

Fuente: encuesta

Aquí se reflejan  los maltratos que más indican haber sufrido las 48 mujeres maltratadas.

¡      “Falta de respeto”,22 (45,83%).

¡      “Gritos”, 16 (33,33%).

¡       “Poner la grabadora  a todo lo que da”, 12 (25%).

 En este registro puede apreciarse la insistencia reiterada de las ancianas en la falta de respeto, como un tipo particular de mal trato.

Los malos tratos apuntados, por las damas afectadas, están circunscritos a la esfera de relación con sus familiares y los mismos tienen su  base en las actitudes discriminativas hacia las personas de la tercera edad.

Se recoge el irrespeto hacia las creencias religiosas de las ancianas (13,3%), como una forma emergente de maltrato orientado a las ancianas en nuestro país. López Pérez (López, 1996) señala que el tipo de maltrato que más afecto a los sujetos de su estudio fue el de palabra (40,7%). (21)

 

Tabla 12 Clasificación de los maltrato recibidos

Clasificación

Frecuencia

%

M. Psicológico

176

95,65

M. Físico

7

3,8

M. Espiritual

2

1,08

Total

185

100

 

Fuente: encuesta

Grafico 9

Atendiendo a la clasificación de los tipos  maltratos,  propuesta por este autor, puede apreciarse en la tabla una significativa presencia del maltrato psicológico, forma más sutil de violentar a una persona de difícil demostración mediante palabras e identificación por tercera personas.

 

Tabla 13 Sentimientos generados por los maltratos sufridos

  Sentimiento generado

Sujetos

  %

Impotencia

26

54,16

Pena 

22

45,83

Sentimientos de soledad

16

33,33

Desesperanza

10

20,8

Dolor

10

20,8

Indiferencia

1

2,08

Fuente: encuesta

Entre los sentimientos generados por los maltratos recibidos se destacan por su frecuencia de presentación: Impotencia 26(54,16%), pena 22 (45,83%), sentimientos de soledad 16 (33,33%).

 

Tabla 14 Conducta ante los maltratos sufridos

Conducta

Sujeto

%

Activo

10

20,8

Pasivo

35

72,91

Indiferente

3

6,25

Total

48

100

Fuente: encuesta

Grafico 10

La conducta de respuesta ante los maltratos fue clasificada en activa, pasiva e indiferente. El 72,91% de las féminas maltratadas asumió un comportamiento pasivo. Asumieron cierto nivel de actividad 10 (20,8%) ancianas y permanecieron indiferentes 3 (6,6%) mujeres. López Pérez señala que los comportamientos más frecuentes en los sujetos de su muestra fueron la pasividad y la indiferencia.


Tabla 15 ¿Qué le hubiera gustado hacer?

¿Qué le hubiera gustado hacer?

Sujetos

%

Darles un escarmiento

25

52.08

Hacer justicia

10

20.83

Perdonarlos

6

12.5

Lo que hice

3

6.25

Reclamar mi derecho

3

6.25

Fuente: encuesta

A esta pregunta poscomportamientos mencionados con mayor frecuencia fueron:

§         Darles un escarmiento 25 (52,08%).

§         Hacer justicia 10 (20,83%).

§         Perdonarlos 6 (12,5%).

 

Tabla 16 ¿A quién recurrió?

¿A quién recurrió?

Sujetos

%

A nadie

48

100

A alguien

______

______

Total

48

100

Fuente: encuesta

El 100% de las féminas maltratadas no recurrió a nadie para tratar de resolver situación.

 

Tabla 17 Maltratos presenciados

Maltratos presenciados

Sujetos

%

Si

71

61,73

No

44

38,26

Total

115

100

Fuente: encuesta

El 61,73% de las ancianas declararon haber presenciado malos tratos hacia otras personas.

 

Tabla 18 Tipos de maltratos presenciados en otras familias

Tipos de maltratos presenciados

Sujetos

%

Gritos

48

67,60

Falta de respeto

34

47,88

Malas palabras

29

40,84

Golpes

22

32,39

Malas acciones

19

26, 76

Empujar

7

9,85

Halar el pelo

5

7,04

Fuente: encuesta

En la tabla 17 los maltratos más observados en otras familias son: Gritos (67,60), Falta de respeto (47,88%), Malas palabras (40,84%), Golpes (32.39%) y Malas acciones 19 (26,76%).

López Pérez (López, 1996) señala  que la agresión más frecuente, presenciada por los sujetos de su investigación fue el ataque de palabras


Tabla 19 Sexo de las personas maltratadas

Sexo

Sujetos

%

Femenino

45

63,38

Masculino

26

36,61

Total

71

100

Fuente: encuesta

Grafico 11

De acuerdo a las testificantes, el sexo femenino  represento el 63,38% de las personas victimizadas y el masculino el 36,61%

 

Tabla 20 Edades de las personas maltratadas

Edades

Sujetos

%

Niños

37

52,11

Jóvenes

7

9,85

Adultos

27

38,02

Total

71

100

Fuente: encuesta

Conforme a lo expresado por las testigos las edades aproximadas de las victimas fueron: 37 (52,11%) niños, 27 (38,02%) adultos y 7 (9,85%) jóvenes.

 

Tabla 21 Conducta de las personas maltratadas

Conducta

Sujetos

%

Llorar

34

47,88

Defenderse

14

19,71

Protestar

9

12,67

Lamentarse

9

12,67

Patalear

5

7,04

Total

71

100

Fuente: encuesta

Las respuestas asumidas con mayor frecuencia ante los malos tratos fueron: llorar 34 sujetos (47,88%) y defenderse 14 personas (19,71%).


Tabla 22 ¿A quiénes recurrieron?

¿A quiénes recurrieron?

Sujetos

%

Otras instancias

10

14,08

A nadie

61

 85,91

Total

67

100

Fuente: encuesta                                                            

Solo el 14,92% de las personas maltratadas  recurrió a otras instancias y el 85,07% restante no busco ayuda.

 

Tabla 23 Conducta de las personas maltratadas

Conducta

Sujetos

%

Activa

_____

____

Pasiva

60

84,50

Indiferente

11

15,49

Total

71

100

Fuente: encuesta

La respuesta ante los maltratos presenciados fue clasificada en activa, pasiva e indiferente. El 84,50% de las testigos adopto un comportamiento pasivo. Permanecieron indiferentes 15,49% espectadoras y el proceder activo no se puso de manifiesto.  


Tabla 24 Edad / Maltrato directo y presenciado

Edad

M. directo

%

M. presenciado

%

65 – 69

3

6,25

18

25,35

70 - 74

13

27,08

26

36,61

75 – 79

22

45,83

20

28,21

80 – 84

7

14,58

7

9,85

85 - 89

3

6,25

  ----

----

Total

48

100

 71

100

Fuente: encuesta

Aquí apreciamos que el  subgrupos de 75 a 79 años fue el más afectado por los malos tratos, pues el 45,83% de las ancianas victimizadas correspondía al mismo, sin embargo, al declararse testigos de agresiones  perpetradas sobre otras personas, pasaron al segundo lugar con el 28,21%  del total. Lo contrario se evidencio en las féminas de 70 a 74 años, quienes representaron el 27,08% de las afectadas por el maltrato directo, pero fueron las que más acciones violentas presenciaron (36,61%). Si nos guiamos por los presupuestos teóricos de los creadores de la encuesta es probable que determinado número de las féminas, que plantean ser espectadoras de agresiones, sean ellas mismas y no otras las victimas directas de los daños, pero se resisten a personalizarlo.

 

Tabla 25 Estado civil / Maltrato directo y presenciado

E. civil

M. directo

%

M. presenciado

%

Casadas

4

8,33

12

16,9

Solteras

11

22,91

24

33,80

Viudas

23

47,91

19

26,76

Divorciadas

10

20,83

16

22,53

Total

48

100

 71

100

Fuente: encuesta

Las viudas  resultaron ser las victimas más frecuentes de malos tratos con el 53,3% de las afectadas, no así como espectadoras donde representaron el 15,3%. Las solteras constituyeron el 13,3% de las féminas maltratadas, pero su implicación al presenciar conductas abusivas fue la de mayor significación con el 36,8%.

 

Tabla 26 Convivencia / Maltrato directo y presenciado

Convivencia

M. directo

%

M. presenciado

%

Solo

9

18,75

16

23,88

C/cónyuge

14

29,16

11

16,41

Familia

25

52,08

31

46,26

otros

__

___

7

13,43

Total

48

41,73

 67

58,26

Fuente: encuesta

La vivencia de malos tratos  fue experimentada por las mujeres cuya vida transcurre en familia (52,08%) y además representaron el 46,26% de aquellas que fueron testigos de los  mismos cuando se ejercían sobre otras personas. Las féminas casadas (29,16%), fueron las segundas en ser victimizadas, pero ocuparon el tercer lugar (29,16%) al presenciar malos tratos hacia otras personas.

 

Tabla 27 ¿UD cree que valdría la pena que este tipo de cosas se sepan?

Que se conozcan

Sujetos

%

Si

83

72,17

No

32

27,82

Total

115

100

Fuente: encuesta

Grafico 12

El 72,2% de las integrantes de la muestra respondieron afirmativamente a esta pregunta y el 27,7% no considero adecuado que el maltrato se haga publico. La mayoría de los sujetos encuestados por López Pérez (67,1%) respondió afirmativamente a esta pregunta.


Tabla 28 ¿Como se podría dar a conocer?

    ¿Como se podría dar a conocer?

Sujetos

%

Programas de radio y Televisión

58

50,43

Reuniones de Federación de Mujeres Cubanas

31

26,95

Charlas educativas del medico de familia

26

22,6

Escritos periodísticos

7

6,08

Fuente: encuesta

Las ancianas que consideraron valiosa la difusión de los maltratos hacia las personas seleccionaron medios adecuados para lograr este objetivo:

§         Programas de radio  y Televisión, 58 (50,43%).

§         Prensa escrita, 7 (6,08%) .

§         Programas de radio  y Televisión, 58 (50,43%)

§         Reuniones de Federación de Mujeres Cubanas, 31(26,95%).

§         Charlas educativas del medico de familia, 26 (22,60%).

En la investigación de López Pérez (López, 1996) la mayoría de los ancianos desean que se conozca a nivel social la existencia del maltrato a los ancianos y prefieren para su divulgación por el orden siguiente la prensa escrita, la radial y la televisiva. En la investigación de Rodríguez Miranda  la población muestral sugiere evitar el maltrato al adulto mayor denunciándolo a las autoridades, inculcándole respecto hacia ellos desde la escuela y en la familia,  así como divulgándolo mediante la prensa, radio y televisión. (21)


Tabla 29 ¿Quiere agregar algo al tema del maltrato?

               Temas señalados

Sujetos

%

La culpa la tiene la mala educación de hoy en día

40

34,78

La policía tenía que intervenir más en estos asuntos

37

32,17

La ley tiene que ser dura y castigar severamente

32

27,82

Educar en el respeto a los ancianos

26

22,60

Tienen que dar moral y cívica en las escuelas

18

15,65

Quitar las películas de violencia de la televisión

14

12,17

La gente no tiene sentimientos religiosos

6

5,21

Los padres son agresivos y los hijos los imitan

4

3,47

Fuente: encuesta

Las ancianas abordan aspectos referidos a la vida social del país y que tiene que ver con la disciplina social, la educación, la programación televisiva, etc.

 

CAPÍTULO 6

CONCLUSIONES

1.     Las ancianas de la muestra son capaces de conceptuar el maltrato de forma global y en particular hacia las personas de la tercera edad.

2.     El maltrato intrafamiliar hacia las mujeres ancianas del Cerro, ingresadas en el Complejo Gerontológico del Hospital Dr. Salvador Allende, existe, pues  el 41,73% de las encuestadas dijo haber sufrido  maltrato directo y el 61,73%  haberlo presenciado  hacia otras personas.

3.     La forma preponderante de maltrato fue el psicológico y en particular “la falta de respeto”, que podemos describir como un estado de insatisfacción general de la persona anciana con relación al trato que recibe de otro u otros.

4.     La pasividad fue la respuesta más común frente al maltrato, de las ancianas victimizadas. 

5.     Que la existencia de maltrato hacia los ancianos en el seno  familiar se  conozca y  divulgue, a través de la radio y la televisión, fue el deseo de la mayoría de las  féminas de la muestra.

 

CAPÍTULO 7

RECOMENDACIONES

1.           Ampliar el estudio a un mayor número de personas y áreas de salud para determinar la epidemiología del maltrato hacia las mujeres de la tercera edad.

2.           Efectuar investigaciones más profundas que nos permitan precisar las causas del maltrato hacia las ancianas.

3.           Diseñar instrumentos de mayor validez y confianza para el estudio del maltrato.


CAPÍTULO 8

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1.      Torres Vidal, R. M., Martínez Morales, M. A., Martínez Morales, M. “Panorama de Salud del Adulto Mayor”, 2003. TEMAS DE ESTADISTICAS DE SALUD. Dirección Nacional de Estadísticas. Ciudad Habana, 2002. 

2.      Informe Municipal de Estadísticas 2005. Departamento de Estadísticas de la  Dirección Municipal de Salud.

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CONSENTIMIENTO INFORMADO 

Yo ___________________________________________

Con Carnet de Identidad _________________________

Expreso mi conformidad con  participar en la investigación sobre maltrato a las mujeres de la tercera edad en el medio familiar y responder:

1.  Las preguntas de la entrevista de valoración del estado mental.

2.  Encuesta Sobre Abuso y Maltrato que contiene 24 preguntas.

Firma: ____________________________________


Mini Mental State Examination

1. Orientación:

Ø      ¿En que año estamos?..............................1

Ø      ¿ En que año estación estamos………...1

Ø      ¿En que fecha estamos?...........................1

Ø      ¿En que día estamos?...............................1

Ø      ¿En que mes estamos?.............................1

 

2. ¿Dónde estamos?

Ø      Provincia………………….………..….…1

Ø      Nación………………………………..…..1

Ø      Ciudad…………………………….….…..1

Ø      Institución…………..…………….….….1

Ø      Planta………………………………......…1

 

3. Memoria de fijación:

Nombrar 3 objetos en intervalos de 1 segundo. Después preguntarle el nombre de los tres. Anotar un punto por cada respuesta correcta……………………………….……….3

Repetir los objetos cinco veces.

 

4. Atención y cálculo:

Resta seriada: a cien restarle siete cinco veces

([93, 86, 79, 72, 72, 65] un punto por cada respuesta correcta). Alternativa: deletrear la palabra MUNDO al revés…5

 

5. Memoria de fijación:

Recordar el nombre de los tres objetos aprendidos………3

 

6.  Lenguaje (Nomenclatura):                                             

Señale al paciente un lápiz y un reloj y haga que  los nombre………….2

 

7. Haga que el paciente repita la frase

“Ni sí, ni no, ni peros”…………………………………………….…………1

 

8. Haga que el paciente siga tres tipos de orden

a) Tome el papel con su mano derecha……………………………...….…1

b) Dóblelo a la mitad con ambas manos……………………………..……1

c) Póngalo en el suelo con la mano derecha…………………………...…1

 

9. Haga que el paciente cumpla la siguiente orden:

“Cierre los ojos”………………………………………………..………..…..1

 

10. Haga que el paciente escriba una oración con sujeto y predicado de su propia elección.   

Sin hacer caso a la ortografía…………………….……………………….1

 

11. Reproduzca el siguiente dibujo. 

Anote un  punto si todos los lados, los ángulos y la gestal se mantienen….1                  

Total: 30 puntos


Encuesta Sobre Abuso y Maltrato

  (S. Aguas, M. Bertone, N.  Lew, P. Guido – 1995)

Datos Generales

1.     Edad: _____ Años.

2.     Sexo: _____ M _____ F

3.     Estado civil: ______ Soltero ______ Casado _____ Viudo.

4.     Nacionalidad: _____ Cubana ____ Otra ¿Cuál?_______________________________

5.     Nivel Escolar: _____Primario  ____ Secundario _____­­­­­­­­­­­­ Medio Superior

                         _____ Universitario _____ Técnico medio.

6. Convivencia: _____ Solo ______C/ cónyuge _____ C/ familia ______ Otros.                                 

¿Cuál?_________________________________________________________________

7. Situación laboral: ____ Jubilado  ____Trabajador activo____ T. por c/propia.

8. Su situación económica es:___ Buena ___ Regular ___ Mala

9. Participa en alguna organización de la tercera edad: ______ No ____ Si

¿Cuál?__________________________________________________________________

10.  Maltrato es: __________________________________________________________

_______________________________________________________________________

_______________________________________________________________________

a) De un ejemplo: _________________________________________________________

_______________________________________________________________________

_______________________________________________________________________

_______________________________________________________________________

11. Maltrato en la vejez es:___________________________________________________ 

_______________________________________________________________________

_______________________________________________________________________

a) De un ejemplo: _________________________________________________________

_______________________________________________________________________

_______________________________________________________________________

12. ¿Recibió UD alguna forma de maltrato?  ______Si ______No

¿Cuál?­_________________________________________________________________

_______________________________________________________________________    

13. ¿Qué sintió?___________________________________________________________

 14. ¿Qué hizo?____________________________________________________________

_______________________________________________________________________

15. ¿Qué le hubiera gustado hacer?____________________________________________

_______________________________________________________________________

16. ¿A quién recurrió?______________________________________________________

_______________________________________________________________________

17. ¿Tiene UD conocimiento de alguna persona allegada halla recibido maltrato?

_____ No _____ Si   ¿Cuál?__________________________________________________ 

18. ¿Qué hizo la persona?____________________________________________________

_______________________________________________________________________

19. ¿A quién recurrió?_______________________________________________________

 20. ¿Qué hizo UD?_________________________________________________________

_______________________________________________________________________

  21. ¿UD cree que valdría la pena que este tipo de cosas se sepan?

______ No ______Si

22. ¿Cómo?_______________________________________________________________

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

23. ¿UD lo haría? _____No ____ Si ______

¿Cómo?__________________________________________________________________

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

24. ¿Quiere agregar algo al tema del maltrato?

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

________________________________________________________________________

                

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