EL MALABARISMO archivo del portal de recursos para estudiantes robertexto.com

Material enviado por
Ricardo Pérez
Sociología UCV 25-07-2007

 

Los Malabares

En su calidad de mercancías, el Malabar incursiona en el mercado frente a otras mercancías sin ninguna distinción. En lo concreto podemos decir: que desde ésta óptica, no tiene diferencia alguna, es idéntica en todas sus formas a  las demás mercancías e incursiona en el mercado como un objeto más de cambio y consumo. 

Por ello, es cierto creer que en los Malabares se encuentre la fórmula que nos llevará a demostrar la realidad oculta detrás  de la aparente expresión social. Sabiendo de antemano que la realidad material es una diversidad infinita de cosas concretas y de clases concretas de cosas. El Malabar por lo tanto, no encuentra manera para diferenciarse de otras formas de mercancías, así que sólo podemos encontrar diferencias específicas en sus cualidades físicas concretas. 

Al observar de cerca alguno de estos elementos  encontramos, a demás de una gran variedad de colores fluorescentes, una serie de características que reflejaban racionalidad científica en su diseño. Lo primero que nos llamó la atención fue la calidad y resistencia de los mismos, estos por razones obvias se precipitan constantemente contra el piso y una característica deseable es sin duda su resistencia, la cual solo era posible lograrla con el uso de la ingeniería de materiales.  

Otra característica presente se relaciona con el peso y balance de los mismos. Todos tienen sus centros de gravedad en relación con su uso o función, y aun más, la mayoría son vendidos en empaques que incluyen manuales de usos con juegos y propuestas, así como referencias a otros juegos similares. Pero es evidente que estas características  solo  se podían apreciar a simple vista, era necesario entonces abstraerse para lograr un análisis mucho mas profundo. Por lo tanto; este análisis debía superar no solo su valor de uso, sino también su valor de cambio, así como el valor simbólico  del mismo. 

En lo relacionado a su valor de uso, podemos entender que en los Malabares se encuentra implícito  trabajo concreto, bueno; si alguien produce un bien para su consumo, es evidente que ese consumo solo es posible a través del trabajo, y era cierto que en tiempos muy remotos el homo faber creó  inconscientemente elementos para hacer Malabarismo; pero en la actualidad, estos elementos son presentados sutilmente por grandes empresas fabricantes de juguetes y, sus precios son lo suficientemente costoso para generar enormes plusvalía, pero no era pertinencia nuestra buscar relaciones de explotación en la mercancía, puesto que no era de nuestra incumbencia. El asunto se inclinaba  entonces sobre su valor de cambio y la relación dinero-mercancías-dinero y, buscando información al respecto, conseguimos el siguiente comentario: 

Mario Valladares. Fuente: http://www.magicomalabarismo.cl/ (23-05-2006. 04:53 p.m.)

El otro enfoque sobre los Malabares era el trabajo concreto encontrado en la exhibición, uso  y publicidad. Los Malabaristas de una forma inconsciente presentan exhibiciones y publicitan sobre los Malabares, comercializan sus marcas y modelos, y en ellos es muy común encontrar agrupaciones dedicadas al aprendizaje. En esas agrupaciones se puede distinguir la figura del maestro que enseña a sus discípulos a hacer los trucos conocidos con nombre y apellidos; pero esta relación, ––– que beneficiaba enfáticamente a los productores y comerciante ––, no eran reconocidas por nadie, era un trabajo publicitario ad honoren. Con esto es necesario entender que los Malabaristas no juguetean con los Malabares, sino por el contrario, los Malabares son productos del capital, y hacen creer que el Malabarismo existe deportivamente, así nos encontramos con una “falsa Conciencia” que opera en el pensamiento de los Malabaristas y que conforma junto con otros elementos su ideología única. 

La continuidad, el apego y esfuerzo por aprender los trucos, es la manera de destacarse en el contexto y ambiente de los Malabares, crear nuevas habilidades, es el sueño de todo Malabarista, y este trabajo inconsciente, beneficia al capitalista, pues tarde o temprano, el descubrimiento de un nuevo truco terminará  empacado en la vitrina de alguna casa comercial, por supuesto, con un manual de uso y un elevado precio de venta.

 En esta labor nos tropezamos con la definición sobre ¿qué es el Malabarismo? Y la respuesta obtenida en Internet en la página: Historia del Malabarismo (2) fue la siguiente: 

(2) http://www.malabarismo.cl/general/historia.html

De  igual  manera se le atribuye al Malabarismo dotes matemáticos y cualidades numéricas consideradas como sorprendentes, compuestas de principios de tiempo y control con ciertas analogías en la robótica, el dominio y control de la mente sobre las extremidades del cuerpo. Sin duda alguna, es una visión holìstica referida al desarrollo personal y a toda una corriente psicológica mística espiritual de moda, por lo tanto; fue necesario revisar la realidad histórica del fenómeno, así encontramos afirmaciones que hablaban sobre Egipto en los tiempos del príncipe Beni Hassan (1994-1781ac) donde se han encontrado pinturas que reflejan artistas ejecutando Malabarismos, en el cual se apunta sobre mujeres que ejecutaban el Malabarismo como forma de agradar al príncipe. 

Otra fuente de información la encontramos en "El Talmud", donde se hace referencia a un rabino que se dice, “hizo Malabares con ocho antorchas encendidas y  vasos de vino, sin derramar ninguna gota...” Cabe destacar a Enrico Rastelli, Malabarista que impresionó al mundo entero por la complejidad de sus trucos. “Algunos de sus record fueron 5 pelotas de fútbol y diez pelotas pequeñas manejadas todas al mismo tiempo”. (Historia del Malabarismo http://www.malabarismo.cl/general/historia.html ) 

En el reinado del Gran César, y en la película "El Gladiador", se muestra perfectamente a Malabaristas actuando en las ferias del pueblo. Y no es un secreto para nadie que toda la cultura Egipcia fue llevada por tales de Mileto a Grecia y de aquí a Roma, así  se conoce el famoso dicho de “pan y circo”, actividad muy propia del reino del César para divertir y distraer al pueblo con grandes espectáculos de fieras, Gladiadores, Bailarinas y Malabaristas; pero aun así, sabiendo que el Malabarismo fue una forma de acceder al perdón y congratulación de los reyes, hablar de relaciones de explotación capitalista no es posible, puesto que el capitalismo y sus formas de aprovechamiento surgieron definitivamente después de la revolución francesa, aunque para Marx este fenómeno nace precisamente de la apropiación primitivas de  los medios de producción y el dominio de los unos sobre los otros y el surgimiento de la esclavitud. Cierto es, que de algún modo, el Malabarismo fue antes del desarrollo del cine y la televisión, una forma de ganarse la vida, aludiendo con este concepto la relación de trabajo intrínseca en los Malabaristas de las sociedades modernas y por ende, una forma muy explicita de explotación social por parte de los grandes propietarios de teatros y circos. 

En 1930  gran parte de Europa y Norteamérica se hizo muy  popular el "Espectáculo de Variedades" entre las clases medias-altas, que sacó a los Malabaristas de las calles y cárceles europeas y los llevó a trabajar en Teatros y Circos. Las tablas y escenarios acondicionaban una gran variedad de trucos como Malabares, personas bizarras, y equilibrios, los cuales se hicieron rápidamente populares y se esparcieron por todo el occidente. 

Con el  transcurrir del tiempo, los espectáculos y circos  sucumbieron  ante el avance estrepitoso de la televisión y las películas, desplazando a los Artistas y Malabaristas al retiro forzoso que culminó con la  creación en 1947 de la “Asociación Internacional de Malabaristas” (IJA). También se habla del burgués de Hovey, conocido Profesor y Malabarista que en una oportunidad realizó Malabares con un cigarrillo que se comercializaba en ese tiempo, por lo que la compañía que distribuía dicho cigarro le pagó una buena cantidad de dinero por la propaganda, se dice que sus estudiantes aprendieron el arte y se expandieron por todo los EE.UU. He aquí cuando en los años ochenta comienzan a verse Malabaristas por todas partes del mundo, la mayoría de ellos estudiantes universitarios que huyendo de la explotación salvaje propuesta por los McDonalds se apropiaron del Malabarismo como una forma de trabajo, donde la ideología en términos generales se concentraba en la rebeldía contra el sistema de explotación de las grandes trasnacionales dedicadas al expendio de comida rápida, por estas mismas razones tal ves se crea ilusamente en que escaparon del problema del pago a destajo propuesto por el pensamiento del neo-liberalismo económico de nuestros tiempos, sin embargo, nuestra tesis afirma que el Malabar era un hecho pre-existente del cual se generaba el Malabarismo, así que decidimos revisar el mercado de Malabares, puesto que todos los Malabaristas utilizan elementos altamente racionalizados con características muy particulares que incluyen nombres de los trucos, así como manual de instrucciones para realizarlos. 

Al realizar la investigación conseguimos la siguiente lista de tiendas especializadas en la venta de artículos de Magia, Trucos y Malabares, esta información la presentaríamos como evidencia material que supone la sutileza del acto como  parte del sistema de producción de bienes materiales:

Fuente: http://www.malabarismo.cl/general/historia.html .

 Malabarismo: Arte o trabajo

Al presente, la cuestión radica en que es realmente trabajo y qué diferencia puede existir entre el arte y el trabajo. ¿Son los Malabaristas artistas o trabajadores? Así menciona F Engels en su libro sobre la Dialéctica de la Naturaleza , donde afirma: que el trabajo y el hombre están fuertemente relacionados en una unidad dialéctica que los conforma: 

F Engel. Dialéctica de la naturaleza, editorial Grijalbo. S.A., México D.F. 1961. Véase: El capitulo dedicado a “El papel del trabajo en el proceso de transformación del mono en hombre”. 

En  sus  escritos,  Engel  amplía admirablemente el concepto de trabajo, acrecentándose para ello, en la asistencia de las teorías Darwinianas, donde explica: que el  hombre proviene de un  tipo  de primate  que vivió  en la Antártica perdida, y que este liberó sus miembros delanteros  al encontrarse  con  el  suelo  y  lograr caminar semi erguido, trayendo como consecuencia la especialización de la mano, siendo posteriormente la primera herramienta propia de nuestra especie, y qué como producto de la necesidad, se vio obligado a construir herramientas y armas para  garantizar su  vida y su  alimentación. 

La evolución de la mano es entonces un producto de la necesidad, es este el miembro más efectivo del hombre, con el cual ejecuta tanto el arte más delicado, como el más rudo de los trabajos. Es por medio de la mano, el consumo de carne y el lenguaje, que el homínido obtuvo ventajas sobre otras especies, puesto que en él reino animal,  es el único que tiene conciencia de lo que hace. Anaxágora lo dedujo de una manera muy particular: 

El trabajo representa para el hombre la manera de sobrevivir en la sociedad que habita, es precisamente  y  par excellence, –– homo faber –– que como producto de la necesidad, trabajó y trabaja con la finalidad de existir dialécticamente como ser social. A la sazón, El hombre se encuentra objetivado por la necesidad que lo lleva al movimiento con la intención de sastifacer sus necesidades, y de ésta manera logra socializarse convirtiendo el trabajo en un producto socialmente necesario. 

Todo movimiento para realizarse necesita de energía. El uso de ella representa trabajo que se mide en relación con las unidades de espacio y tiempo y;  en el caso de los seres humanos, se calcula por el tiempo necesario para producir una mercancía o realizar un trabajo específico. Éste trabajo se transfiere a la mercancía misma, que lleva intrínseca dentro de ella el trabajo humano in abstracto, pasando a ser un costo de producción que se refleja en el precio, y trayendo como consecuencia que no sea el capital el que aumenta la mercancía, sino la mercancía la que aumenta el capital, puesto que en ésta, se encuentra la riqueza acumulada, es decir, trabajo humano, que finalmente se traduce en dinero, que es la mercancía universal con que se hacen todos los cambios. 

Hasta aquí podemos entender, que el trabajo surge como fuerza objetiva del hombre a través de su historia y su acción sobre la naturaleza, la cual cambia a su antojo, y que no es más que el producto  de su necesidad, quedando siempre contenida en la mercancía llamada dinero,  fuente o célula principal del sistema capitalista. Por otra parte, por estar relacionado el trabajo con el movimiento y debido a esto; al consumo de energía, entonces se presenta el tiempo y la distancia como formas elementales de medir el trabajo del hombre.  Karen Kosik  lo define así: 

Karen Kosik. Dialéctica de lo Concreto. Versión en español y prólogo de Adolfo Sánchez Vázquez. Editorial Grijalbo, S.A., México., D.F. 1976. Véase: Capitulo dedicado a El hombre y la cosa o la naturaleza de la Economía. Pág. 205.

La historia  acusa al hombre de ser un animal simbólico, e innumerables son los descubrimientos de dibujos y aeroglifos encontrados en cuevas y cavernas, que datan de más de 5000 años, donde el hombre primitivo expresó  su condición artística de la contemplación, el arte y el lenguaje. 

El arte, al igual que el trabajo, requiere entonces de movimiento y transformación de materias. Gasto de energía y tiempo para su realización; pero sólo es arte si no obedece al factor necesidad. Aquí la diferencia más cercana es ésta, mientras la necesidad obliga al trabajo, su ausencia es necesaria para el surgimiento y desarrollo del  arte, de otra forma, se ve convertido o convertida en trabajo. Karen kosik lo dice así: 

Karen kosik. Dialéctica de lo Concreto. Versión en español y prólogo de Adolfo Sánchez Vázquez. Editorial Grijalbo, S.A., México., D.F. 1976.

Sin embargo, estos artistas producen un tipo de mercancía mucho más compleja aún, se trata de la producción de ideologías, al ser reproductores sumisos al sistema, trabajan dominados por éste de una forma muy particular. Del exterior son sometidos por las estructuras de la alienación, que son los hilos invisibles de la superestructura, y por dentro, manejados por la más perfecta arma del capitalismo, la ideología y la falsa conciencia, que no son otra cosa que un tipo de lenguaje, valores y representaciones, –– propuesto principalmente por los medios de comunicación ––, que conforman un sistema de creencias que el hombre acepta pasivamente sin realizar un examen crítico del mismo, esto lo hace creer partícipe exitoso del sistema, y  a su vez,  se encuentra determinada por la historia del hombre, que no es otra que la lucha de clases. En La Plusvalía Ideológica. Escribe Ludovico Silva: 

Ludovico Silva. La Plusvalía Ideológica. Colección Avance, tercera edición. Ediciones de la biblioteca de la Universidad Central de Venezuela. Caracas.1977. Véase. (Paréntesis sobre artistas e intelectuales)

En resumidas cuentas, les pasó igual que los hippie de los años 70, todos sin excepción, se convirtieron en grandes consumidores de motocicletas, chaquetas de cueros y todo tipo de aperos, y que hoy en día representan un tipo de vida materialmente imposible de llevar por parte de los jóvenes de las clases trabajadoras, ya que estos enseres son sumamente costosos y, dicho  movimiento intelectual, que se originó en contra de la sociedad de consumo, terminó siendo dominada hasta el punto de sumergirlos en la conformidad absoluta.  

La definición de Malabarismo resulta totalmente contraria a como se puede creer, como modalidad de una supuesta manera de protestar, no es otra cosa que una válvula de escape  propuesta por el sistema, el cual produce y modela sus forma de variación. De igual manera, cierto es que de original nada tiene, pues es el sistema de producción capitalista el padre de todos sus trucos, y los Malabaristas empleados a destajos sometidos al dominio impecable de la ideología y la falsa conciencia. 

El <trabajo sugerido> se presenta en el día a día de la ciudad., y no es inusitado conseguirlo, puesto que estos tipo de servicios son espontáneamente presentados en restaurantes, estacionamientos, posadas, hoteles y en cualquier lugar o establecimiento de la ciudad, en donde un desconocido, –– por ejemplo ––,  puede cuidar de su vehículo sin usted  saberlo, pero al regresar a él, deberá cancelar un pago por su guardia y custodia, o en el caso del “guitarra” que se acerca a la mesa de la pareja, y sin mediar palabra, emprende la populosa canción de enamorados, el cual pone de manifiesto la obligación amable del pago por servicios, al cual resulta difícil oponerse en dicha situación. 

Pero a simple vista todo parece resuelto, sin embargo no lo está, puesto que si al ver vamos, el Borrachito no escapa del sistema, consume y mantiene con su  tributo, a los grandes comercializadores de licores, quedando atrapado por el medio en la misma condición que los Malabaristas, que a diferencia de ellos consumen Malabares, películas, cursos y otras mercancías con fines de uso. Así su diferencia básica es el trabajo, y su similitud el dinero que reciben; pero advertimos, que el sólo hecho de recibir dinero no hace que sean comprendidos como Malabaristas; pero si como productos de una misma realidad y situación social, ambos se encuentran en la calle, así los Borrachitos piden para saciar sus ansias  sosteniendo el sistema capitalista que los contienen, mientras que los Malabaristas son comprendidos como explotados por el sistema, pues de otro modo no quedaría más remedio que incluirlos en  la categoría de Mendigos, Borrachitos , Niños en situación de calle o Locos; pero ellos representan una forma de trabajar, y el dinero que reciben no es otra cosa que el resultado de sus esfuerzos, actividad que no realizan los demás  personajes. 

Con el devenir de la propina se nos remonta forzosamente, a otro personaje que también exige o recibe propinas. Si el Malabarista exige o recibe la propina o pago, es un problema difícil de explanar, queremos decir: Que si a propina nos referimos, ésta se da por la exigencia de la misma, mientras que el pago, hace referencia a una obligación donde se integra una relación de trabajo determinado. Pero  en el caso de la propina y su exigencia “gestual”, nos encontramos con el Mendigo, el cual pide con la mano la llamada propina o dádiva; pero que ella, jamás hace referencia a una relación de trabajo, por lo tanto; la propina y el pago, son caras de una misma moneda, y quedan determinadas dialécticamente por el que la da, y el que la recibe; en la cual intervienen un tipo de acción que alude al reconocimiento de una de las partes sobre la otra. Sin embargo, el que la pide se cree merecedor de ella, aunque no esté contenida por esfuerzo alguno y, en el caso de los Mendigos, se da por una condición humana del exitoso sobre el caído, debido a esto, es una especie de reconocimiento social del fuerte sobre el débil; que en ambos caso, relaciona a los Malabaristas, puesto que ellos utilizan el lenguaje gestual para que su <trabajo sugerido> sea reconocido, así aclaramos que esta analogía, encierra a ambos personajes a tal punto que pueden ser objetos de confusión, sin embargo, no nos referimos en éste trabajo, a los Mendigos, y advertimos, que nuestro objetivo es el Malabarismo. 

En diversas ocasiones logramos ver en una misma esquina,  Malabaristas, Niños en situación de calle, Borrachitos, Mendigos y Locos. Los cuales hacen recordar las crisis del siglo XVII y XVIII; pero todos, sin excepción, son el producto de una realidad social determinada por una época o etapa muy particular, la conocida como capitalismo neoliberal. Pero el personaje más polémico de todos está contenido en el Loco, el cual es un personaje, que según las palabras de Michael Focault: “Historia de la locura en la época clásica” (1972), es el producto del surgimiento de la sociedad moderna, puesto que según él, la época clásica jamás pudo reconocerlo, por lo tanto; el Loco es el producto del  surgimiento de un nuevo tipo de sociedad. La cual consideró Loco, a todo aquel que no se ajustara a los modos o modelos de vida implantados por la clase  burguesa, quedando entre ellos hombres mujeres y niños pobres como los primeros candidatos a ocupar los manicomios de la Salpetiere y la Bicetré entre otras instituciones creadas para tal fin. Ahora la pregunta quizás sea: ¿Qué relación tiene el Loco con el Malabarismo? Y la respuesta más simple es: que el Loco es el único personaje que se ha logrado escapar de los embates de la sociedad, no trabaja, no mendiga, no consume productos en ningún tipo de tiendas, pero habita la calle al igual que todos los personajes mencionados antes aquí.

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